ALFALFA, CLAVE PARA MULTIPLICAR LOS RENDIMIENTOS DEL VALLE

Por la superficie ocupada, y debido a condiciones para su producción, facilidad de conservación, y ...

Actualidad 04 de octubre de 2015 Información LU17
Por la superficie ocupada, y debido a condiciones para su producción, facilidad de conservación, y demanda, la producción forrajera en base a este cultivo es la actividad más predominante en la zona. Sus potenciales productivos y económicos permiten triplicar la eficiencia y duplicar la cantidad de carne producida por hectárea.

Cerca del 90% de  la superficie cultivada del VIRCH se destina al cultivo de  pasturas  perennes (o permanentes) y dentro  de ellas,  un 25%  es utilizado para la producción de alfalfa, cultivo que ocupa uno de los ejes centrales en los sistemas productivos de carne del Valle,  por su rol en la  venta de fardos entre productores, y en el el destino de los excedentes de menor calidad, en las tradicionales actividades de ciclo de recría y engorde de ganado en la zona..

El heno de alfalfa se ubica como recurso fundamental y estratégico para la producción en los valles y las zonas áridas de la provincia: “existe  cierta tradición de  intercambio de fardos por ovinos de refugo (animales descartados por edad o  selección productiva)  procedentes de campos de la meseta, que son aprovechados en los Valles para su engorde y venta a frigorífico, lo que ubica a esta producción como componente económico y productivo de suma  importancia para Chubut”, de acuerdo a lo señalado por Agustín Pazos, Jefe de la Agencia de Extensión Rural VIRCH del INTA Chubut.

Pazos agregó que a esta situación favorable se agrega la posibilidad de “realizar engorde de corderos que no logran la condición de faena al momento del destete en los sistemas extensivos de producción, que ha determinado que en los últimos años se haya implementado la recría y engorde de vacunos procedentes de la zona cordillerana”.

De acuerdo a distintos análisis realizados por el Grupo de Ganadería del INTA Chubut, se estima que actualmente la producción cárnica en los valles chubutenses no supera los 250 kilogramos por hectárea por año, y de ellos, sólo entre 150-170 se logran por la eficiencia del establecimiento, dependiendo estos resultados de las técnicas y manejos aplicados; el resto es debido al suplemento de grano o balanceado, lo que representa costos altos y entrada de productos de otras zonas por fuera de la región.

 

Pazos, que sigue de cerca la relación que se da entre las técnicas de manejo eficiente y la cantidad de kilógramos producidos por hectárea en distintos establecimientos del valle, remarcó que  “con la aplicación de determinadas técnicas de manejo (pastoreo rotativo intensivo, suplementación, entre otras) en engorde vacuno, se pueden alcanzar índices de hasta 500 kilogramos por hectárea por año”, lo que representa el doble de lo que actualmente se obtiene en sistemas que no contemplan la batería de técnicas para tornar más eficientes los recursos disponibles, como agua, forraje y capacidad para almacenar alimento.

 

Con base en los resultados, el especialista agregó que estas diferencias permiten establecer “puntos para el análisis sobre el impacto de manejo del recurso forrajero en la calidad y cantidad de carne producida, en donde la aplicación de técnicas y el uso eficiente han multiplicado por tres los actuales niveles de eficiencia”.

 

Siguiendo este análisis, y a partir de las recomendaciones provistas por técnicos del INTA Chubut, los especialistas señalan que para lograr un eficiente aprovechamiento de las pasturas de alfalfa debe apuntarse a obtener la máxima producción en cantidad y calidad de forraje, sin comprometer la persistencia de las pasturas. Además, sugieren  que para duplicar los resultados, es necesario  implementar adecuados criterios de utilización, y   conocer detalladamente algunas características vinculadas a su  manejo”.

 

Para lograrlo “lo fundamental es que los productores conozcan y sepan cómo producir mayor cantidad y mejor calidad de forraje, y comprender que la respuesta de la producción estará sujeta no sólo a la base forrajera que se implemente,  sino a cómo sea utilizada. El logro de adecuados índices productivos requiere de la aplicación de prácticas orientadas a optimizar el uso de los recursos, lo que permitirá cubrir los requerimientos del animal durante el crecimiento y/o engorde, maximizando así la producción, con un sistema sostenible en el tiempo”, reforzó Pazos.

Jornadas para un manejo eficiente

Organizadas por INTA Chubut,  CORFO,  las municipalidades de 28 de Julio y Dolavon, Consejo Provincial de Ciencias Agronómicas, ARHA y COOPALFA, los días 15 y 16 de Octubre, se realizarán dos jornadas técnicas vinculadas al manejo de Alfalfa; el día jueves 15 se realizará la Jornada Regional de Actualización Técnica en el cultivo de Alfalfa, destinada a técnicos y profesionales. El temario incluye un repaso sobre el panorama general de la alfalfa en Argentina, avances en el mejoramiento genético del cultivo, elección de variedades, control de malezas, manejo (siembra, fertilización, plagas) y confección de heno de calidad.

El encuentro comenzará a las 8.45, y será dictado  en las instalaciones del INTA Chubut, ubicadas  en calle 25 de Mayo 4870 de la ciudad de Trelew. Las disertaciones estarán a cargo de referentes del INTA Manfredi (Córdoba)

En tanto que el viernes 16 se dictará la jornada gratuita para productores “Alfalfa en el VIRCH”, en donde se vincularán aspectos relativos al manejo del cultivo y técnicas para su aprovechamiento eficiente. El encuentro, que será a partir de las 8.30 en el Centro Comunitario de 28 de Julio, culminará por la tarde con una instancia práctica a campo.

Los interesados en asistir, deben realizar una preinscripción a través de los teléfonos (0280)  444-6654 (INTA) o (0280) 4491997 CORFO Gaiman. También, pueden realizar la inscripción al correo electrónico [email protected]

   

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