Videos revelan cómo el dueño de HLB Pharma ordenó destruir pruebas y falsear documentos

Videos de seguridad expusieron la trama de encubrimiento detrás de la mayor tragedia sanitaria del país, al mostrar cómo Ariel García Furfaro, dueño de HLB Pharma, dio órdenes directas para destruir pruebas, manipular documentos y eliminar información vinculada al fentanilo contaminado que causó 124 muertes. La investigación periodística de Andrés Klipphan detalló el material que ya forma parte del expediente judicial.

Las grabaciones, halladas durante un allanamiento en la vivienda de un directivo, se convirtieron en una pieza clave para el procesamiento con prisión preventiva y el embargo de un billón de pesos dispuesto por el juez Ernesto Kreplak contra García, su familia y otros ejecutivos del laboratorio.

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Las reuniones donde se planificó el encubrimiento ocurrieron el 17 y 18 de mayo en el domicilio del director general Javier Tchukrán. En los videos aparecen Ariel y Diego García junto a Tchukrán diseñando un plan para ocultar la evidencia. Allí se registraron órdenes explícitas que revelan la magnitud del encubrimiento.

En uno de los fragmentos, García señala una caja con ampollas y ordena: “Llevate esto, boludo”, instruyendo que se sometan al calor del autoclave para destruir bacterias y pruebas. También pidió completar la “hoja de ruta” de fabricación del lote contaminado, con la firma antedatada del director técnico Antonio Maiorano.

La maniobra incluyó además el apagado de cámaras y el borrado de los servidores, confirmado por Tchukrán: “Hice borrar todo lo que estaba… lo borramos todo, o sea que no hay un solo gramo de información”.

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El relato judicial se agrava con la declaración de Maiorano, quien afirmó haber sido forzado a firmar los documentos. “Tuve que firmar amenazado”, aseguró el director técnico, también procesado en la causa.

El expediente revela además que un control interno había dado positivo a contaminación, pero fue desestimado por la jefa de calidad Adriana Iudica como un simple “error de técnica”. Para el juez Kreplak, se trató de una “tragedia sanitaria” con Ariel García como figura principal, y los imputados deberán responder por adulteración de sustancias medicinales seguida de muerte, delito que prevé penas de hasta 25 años de prisión.

Fuente: N A