

El domingo, cerca de las 22 horas, el Grupo Especial de Alta Montaña (GEAM) de Gendarmería Nacional recibió un llamado de emergencia por dos andinistas extraviados en el paraje Las Leñas, Mendoza. Se trataba de dos ciudadanos oriundos de Rosario que habían perdido el rumbo mientras realizaban senderismo por la zona de la cascada del arroyo Agua Salada, quedando atrapados en un barranco sin posibilidad de continuar por sus propios medios.


Ante la alerta, el personal del Escuadrón 27 “Uspallata” activó de inmediato el protocolo de búsqueda y rescate. Los gendarmes se desplazaron hasta el lugar con equipamiento técnico y elementos de escalada, entre ellos cuerdas, arneses, cascos y sistemas de poleas utilizados para ascensos en terrenos de difícil acceso.
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El operativo se extendió durante varias horas en condiciones nocturnas y de baja visibilidad, lo que exigió la instalación de anclajes artificiales y el armado de un sistema de polipasto para elevar a las víctimas. A pesar de las dificultades, el equipo logró rescatar a los dos andinistas en buen estado de salud, quienes fueron asistidos en el lugar antes de iniciar el descenso.
Pasadas las 3 de la madrugada, los rescatistas y los dos ciudadanos fueron trasladados hasta la Sección Reforzada “Punta de Vacas”, donde recibieron atención médica por parte del enfermero de sanidad de la fuerza. Los andinistas también fueron asistidos con infusiones calientes y alimentos tras las horas de exposición al frío y al esfuerzo físico.
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Desde Gendarmería destacaron la rápida coordinación entre las unidades y la eficacia del protocolo del GEAM, que permitió resolver la emergencia sin consecuencias mayores. El operativo reafirma la importancia de contar con personal especializado en rescates de alta montaña en una región donde las condiciones climáticas y la geografía pueden tornarse riesgosas en pocos minutos.
El paraje Las Leñas y el arroyo Agua Salada son puntos de gran atractivo turístico para senderistas y escaladores, pero los especialistas recuerdan que las caminatas deben realizarse con guía, equipamiento adecuado y comunicación constante, ya que las variaciones del terreno suelen desorientar incluso a personas con experiencia.
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El GEAM recomendó informar siempre a las autoridades locales sobre el recorrido previsto y respetar los horarios de descenso, dado que las bajas temperaturas y la falta de luz pueden complicar el regreso en zonas de montaña.


















