La Agrupación Unidad Carbonera celebró su historia con recuerdos de los fundadores

El aniversario de los 50 años del club reunió a quienes estuvieron desde el primer día y ofreció un repaso cálido por aquellos comienzos marcados por esfuerzo y convicción. “El Tricolor se forma con un grupo de gente que habíamos venido del norte”, recordó José Antonio “Pelado” Rodríguez, quien destacó el deseo común de crear un espacio propio en la ciudad.

Rodríguez explicó que la primera comisión surgió tras largas reuniones en distintos lugares de la ciudad, mientras enfrentaban dudas de algunos vecinos que no entendían su impulso organizativo. “Nos trataban como que veníamos a tomar Madryn”, recordó entre risas, y agregó que con el tiempo la comunidad reconoció su trabajo y acompañó el crecimiento del club. "La entidad deportiva llegó a tener más de 25 deportes diferentes en simultáneo".

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 La búsqueda de identidad institucional fue clave, ya que debían reunir socios y obtener la personería jurídica que permitiera consolidar la estructura del club. Con el paso de los años, la relación con otras instituciones deportivas de Madryn se volvió cercana y colaborativa. Rodríguez mencionó que “el club Ferro nos recibió muy amablemente”, y destacó que Madryn y Ferrocarril Oeste cedían sus canchas cuando era necesario, mostrando una convivencia deportiva que fortaleció a Alumni en su etapa inicial.

Las primeras reuniones, las hacíamos en Ferro, la gente del club nos había invitado a usar sus instalaciones. El surgimiento del primer equipo marcó un punto de inflexión, acompañado por la rivalidad deportiva con Brown que animaba cada fecha. El club fue creciendo entre desafíos, atravesando mudanzas, cambios de sede y proyectos que debían esperar por falta de recursos, siempre sostenido por el aporte constante de sus socios.

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La emoción atravesó el encuentro cuando los fundadores valoraron el empuje de quienes hoy integran la agrupación Unidad Carbonera. “Me dejó muy emocionado ver tanta gente joven con impulso”, expresó Rodríguez, celebrando que las nuevas generaciones mantengan vivo el espíritu que dio origen a la institución.

También participó Héctor Gavilán, otro socio histórico y primer presidente organizador, quien recordó los inicios bajo el nombre Provincia Unida y los esfuerzos para llevar adelante amistosos que muchas veces terminaban siendo verdaderas contiendas. Su testimonio reafirma el carácter artesanal y apasionado del crecimiento del club.

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Gavilán definió a Alumni como “un hijo”, al recordar las reuniones improvisadas bajo la terminal, sin luz y entre palomas, donde se tomaban decisiones fundamentales junto a vecinos comprometidos. Su relato incluyó anécdotas junto a dirigentes que dejaron huella y construyeron un club con identidad propia y fuerte sentido comunitario.

"Los que hoy somos Vitalicios hicimos de todo para la formación del club, recibimos ayuda de muchas partes, principalmente de los socios", dijo Gavilán. "Cuando Madryn tenía unos 7000 habitantes y el club tenía 1200 socios. La gente nueva, la Agrupación, los hinchas, todos, tiene muchas ganas de tomar la posta y seguir trabajando por la institución y éso me deja muy feliz. Hoy, están algunos de los formaron el plantel allá por el `77 y los chicos de primera de la actualidad. El club es de todos. Y 50 años teníamos que celebrarlo".