Conmebol elige nuevas sedes: Montevideo y Barranquilla, epicentros en 2026

La Conmebol confirmó que Montevideo volverá a recibir la final de la Copa Libertadores en 2026, una decisión que reabre la puerta a uno de los escenarios más tradicionales del continente. La capital uruguaya ya tuvo este rol en 2021, en aquella noche recordada por el triunfo de Palmeiras ante Flamengo, y ahora retoma un lugar que mantiene gran peso histórico. El anuncio generó entusiasmo inmediato por el impacto deportivo y cultural que dejará en la ciudad.

La elección refuerza la importancia que mantiene Montevideo dentro del calendario sudamericano, especialmente por su infraestructura y su vínculo directo con la competición. Las autoridades locales celebraron la designación y remarcaron el valor turístico que acompaña cada final del torneo continental. La expectativa crece ante un nuevo evento que atraerá miles de visitantes.

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A nivel político y deportivo, Uruguay ve esta designación como una oportunidad para volver a instalarse en el centro de la conversación futbolera regional. El recorrido reciente de la ciudad en este tipo de partidos sostiene la confianza del organismo. El retorno confirma que Montevideo sigue como referencia en la región.

En paralelo, Barranquilla fue seleccionada para recibir la final de la Copa Sudamericana 2026, un hecho que marca un hito para Colombia. Se trata de la primera vez que la competencia tendrá su duelo decisivo en territorio colombiano desde la implementación del formato de partido único en 2019. La noticia impactó fuerte en la ciudad y en la dirigencia local.

El alcalde Alejandro Char celebró la confirmación con un mensaje público que rápidamente ganó repercusión. “Es de inmensa alegría llevar esta final a nuestra ciudad”, escribió en X con evidente emoción. El dirigente también agradeció el apoyo del presidente de la Conmebol y de la Federación Colombiana.

El presidente Alejandro Domínguez participó de la reunión en la que se resolvió la elección y brindó detalles sobre la votación. Según afirmó, la decisión fue tomada “en forma unánime” por los miembros del consejo del organismo. El mensaje buscó remarcar plena confianza en la organización local.

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La Sudamericana viene de un ciclo de sedes rotativas que incluyó a Asunción, Córdoba, Montevideo y Maldonado, una muestra de la intención de ampliar el mapa continental. Cada ciudad dejó su sello en ediciones recientes y fortaleció la identidad del torneo. La llegada de Barranquilla agrega una plaza nueva y significativa.

La Conmebol también confirmó que Santa Cruz de la Sierra será sede en 2027, luego de un extenso proceso interno. La ciudad boliviana había sido elegida para 2025, pero no logró completar las obras necesarias y debió resignar el lugar. La postergación abre un margen mayor para la final del año siguiente.

Finalmente, la entidad volvió a elegir a Asunción para albergar la definición de 2025, donde Lanús venció a Atlético Mineiro en los penales. El regreso a la capital paraguaya cerró una temporada intensa y consolidó el formato de final única. El calendario 2026 ya queda marcado por dos ciudades con fuerte identidad futbolera.