Tapia reapareció junto a Infantino en Washington en plena tensión con Milei

Deporte05/12/2025

Tapia e Infantino

Claudio “Chiqui” Tapia volvió a ocupar el centro de la escena al mostrarse junto a Gianni Infantino en la previa del sorteo del Mundial 2026, un gesto que impactó de lleno en el clima político que atraviesa la AFA. La foto, difundida por el propio dirigente desde Washington, se interpretó como una señal hacia afuera en momentos en los que mantiene un conflicto visible con el Gobierno de Javier Milei y con el presidente de Estudiantes de La Plata, Juan Sebastián Verón.

Tapia publicó las imágenes con un mensaje que buscó reforzar la dimensión institucional del encuentro. “Viviendo la emoción de lo que será una jornada muy especial para el mundo y para todo el pueblo argentino”, escribió, y agregó un agradecimiento directo al titular de la FIFA por el recibimiento. El posteo llegó horas antes del sorteo que definirá el cuadro del Mundial de Estados Unidos, Canadá y México 2026.

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En las fotos, Tapia aparece acompañado por Alejandro Domínguez, presidente de Conmebol, por Luciano Nakis, prosecretario de AFA, y por el ex futbolista Maximiliano Rodríguez, quien participa de actividades protocolarias ligadas al evento. La presencia conjunta reforzó la imagen de alineamiento entre las instituciones que gobiernan el fútbol regional y global.

La aparición pública se dio mientras se sostiene una disputa creciente entre la AFA y el Gobierno nacional, luego de cuestionamientos sobre la conducción, reclamos de transparencia y roces en torno a decisiones deportivas y administrativas. La fricción escaló con el surgimiento de versiones sobre intentos de intervención y con declaraciones cruzadas que pusieron en alerta al entorno dirigencial.

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La tensión también incluye a Juan Sebastián Verón, presidente de Estudiantes, quien expresó críticas abiertas a la actual gestión de AFA. Su postura generó un nuevo capítulo en la interna, en un escenario que puso en debate el rumbo político del fútbol argentino y los niveles de autonomía institucional frente a los cambios que impulsa la Casa Rosada.

Mientras tanto, Washington se transformó en el centro de atención internacional. Tapia buscó mostrar normalidad y respaldo, consciente de que su presencia en el evento global envía señales a un tablero en el que confluyen poder deportivo, política interna y expectativas de los hinchas.

En este contexto, el dirigente apostó a la diplomacia y a la exposición pública para reafirmar su posición dentro del ecosistema internacional del fútbol. La imagen con Infantino operó como un mensaje directo, en un momento atravesado por disputas que exceden lo deportivo y que reconfiguran las relaciones entre la AFA, el Gobierno y los clubes.