Boca golpeó en los minutos justos y se quedó con el Trofeo de Campeones de Reserva

Boca cerró una temporada perfecta. Le ganó 2-0 a Vélez y se consagró campeón del Trofeo de Campeones 2025 de Reserva en el estadio Florencio Sola, donde una semana antes ya se había quedado con el Torneo Clausura ante Gimnasia. Esta vez, derrotó al campeón del Apertura y se llevó el título que corona al mejor del año.

El partido empezó mejor para Vélez, que tomó la iniciativa y generó las primeras situaciones claras. Bautista Ramírez probó desde la derecha con un remate alto y Damián Domínguez exigió a Leandro Brey con una jugada individual que terminó en un disparo cruzado contenido por el arquero de Boca, sólido cada vez que lo buscaron.

Cuando la primera mitad se consumía, Boca golpeó en el momento ideal. En el segundo minuto de descuento, tras un córner al primer palo, Iker Zufiarre se anticipó y metió un cabezazo que cambió de poste la trayectoria de la pelota, descolocó al arquero y marcó el 1-0. Gol de vestuario y golpe anímico para Vélez.

El complemento arrancó con otra señal del “Xeneize”. Zufiarre tuvo el segundo antes del minuto, con un desborde por derecha y un remate alto que controló Álvaro Busso, en una jugada que mostró que Boca no pensaba refugiarse cerca de su arco.

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Vélez respondió rápido y se mantuvo en partido. Francisco Pozzo controló dentro del área grande y definió de derecha, con el pie abierto, pero el tiro se fue cerca del palo, en una de las chances más claras del conjunto de Liniers.

La más nítida para el Fortín llegó a los 27 minutos. Un cabezazo de Leonel Flores obligó a una respuesta corta de Brey y, en el rebote, el propio atacante remató, pero el defensor Lucio Valdez salvó sobre la línea y sostuvo la ventaja de Boca, en la acción que pudo cambiar la historia.

Con Vélez jugado al empate, Boca encontró el golpe final. A los 43 minutos del segundo tiempo, Lautaro Bianco recibió por izquierda, avanzó y definió cruzado y bajo al primer palo para el 2-0, un gol que sentenció el título y desató el festejo azul y oro en Banfield.

Con esta victoria, Boca cierra el año como campeón del Clausura y del Trofeo de Campeones, con una reserva que se afirma como la más fuerte de la temporada, respaldada por nombres que ya empiezan a pedir pista en Primera.