Una reunión sobre el sistema de aguas quedó sin audio en la Legislatura de Río Negro

La Legislatura de Río Negro no cuenta con un registro de audio utilizable de una reunión reservada realizada el 10 de diciembre, donde directivos de la empresa estatal israelí Mekorot presentaron detalles de su consultoría para la reforma integral del sistema de aguas en la provincia. El encuentro se llevó adelante en el ámbito parlamentario y, según la fuente, debía quedar grabado.

La reunión tuvo lugar en la Comisión de Planificación, Asuntos Económicos y Turismo y se extendió durante varias horas. Aunque se trató de una instancia reservada, el registro había sido solicitado con anticipación, tanto por organizaciones sociales y ambientales como por una legisladora de la oposición, con el objetivo de contar con una copia taquigráfica completa.

En ese marco, la diputada Magdalena Odarda recibió una notificación informal sobre el estado del material. Desde la comisión le indicaron que “no se escucha el sonido”, una situación que dejó sin acceso audible a la presentación realizada por la empresa extranjera contratada por el Estado provincial.

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La explicación técnica también fue comunicada de manera textual. Según el mensaje recibido por Odarda, “el archivo (audio) de la versión taquigráfica está dañado, hay un error entre la línea de salida del audio y la consola, lo cual impide que el audio salga limpio. Está la grabación pero no se escucha el sonido”. Esa falla imposibilitó la reproducción del contenido.

El pedido previo de la copia taquigráfica daba por hecho que la reunión contaría con un sistema de grabación funcional. Sin embargo, el resultado fue un archivo sin sonido, pese a que la grabación figura como existente. Ese dato condiciona cualquier revisión posterior de lo expuesto en comisión.

La consultoría presentada corresponde a un proceso de reforma integral del sistema de aguas en Río Negro y se encuentra a cargo de Mekorot, una empresa estatal de Israel. El texto fuente sostiene además que el informe final ya recibió una aprobación política por parte del gobierno provincial.

No obstante, el mismo texto remarca que ese informe todavía no está finalizado y que no se conoce una versión preliminar. Esa combinación de factores —sin audio audible y sin documento disponible— limita el acceso a la información discutida en el ámbito legislativo.

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La ausencia de un registro sonoro verificable también reduce la posibilidad de reconstruir las intervenciones, consultas y respuestas que se produjeron durante la exposición. En términos institucionales, el episodio deja abierta una discusión sobre los mecanismos de registro y control de reuniones vinculadas a políticas públicas sensibles.

El caso toma relevancia en un contexto donde el manejo del agua ocupa un lugar central en la agenda provincial. Lo ocurrido en la comisión legislativa se apoya en datos concretos: una reunión realizada, un pedido formal de registro y un archivo que, según se informó, no permite escuchar lo que allí se dijo.