El incendio destruyó quincho y hostería.
Las noches del 25 y 26 de diciembre dejaron un ritmo inusual de intervenciones para los Bomberos Voluntarios de Esquel, con focos de incendio que se repitieron en distintos sectores de la ciudad y también en la región. En pleno festejo navideño, las dotaciones se movieron con rapidez para contener quemas de pastizales que aparecieron en distintos horarios y en zonas separadas, con preocupación por la reiteración en poco tiempo.
Durante la madrugada del 25 de diciembre, los bomberos realizaron dos salidas por quema de pastizales. La primera intervención ocurrió a las 2:44 en la intersección de Alberdi y Humphreys, y la segunda se registró a las 6:05 por un foco similar en Pellegrini y Humphreys. En ambos episodios, las dotaciones controlaron las llamas con rapidez y evitaron que el fuego corriera hacia otros sectores.
La actividad se intensificó en la madrugada del 26 de diciembre, cuando a la 1:33 se concretó una intervención fuera del ejido urbano, dentro del Parque Nacional Los Alerces, en Bahía Rosales. Allí el incendio afectó un quincho y la hostería, y además se registraron focos en la zona de El Maitenal, sector alto, según el parte informado. El trabajo incluyó coordinación con personal del parque y un despliegue que buscó frenar daños en un punto turístico muy concurrido en temporada.
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En ese operativo, se conoció un detalle sobre el despliegue y los resultados del trabajo en el lugar. “Tres dotaciones de bomberos y 11 bomberos trabajaron en el lugar, además de personal del parque. Se pudo salvar la proveeduría”, indicó el segundo Jefe de Bomberos de Trevelin, Ángelo Cárcamo, en una declaración vinculada a la intervención. La frase aporta una dimensión concreta sobre recursos y sobre lo que se preservó pese al avance del fuego.
Minutos después, a la 1:38, los bomberos volvieron a actuar, esta vez dentro de Esquel, por otro incendio de pastizales en Humphreys y Pellegrini. Ese episodio sumó un elemento policial: se produjo la aprehensión de un sujeto señalado como presunto responsable de haber originado el fuego. La situación reforzó la preocupación por la posibilidad de focos provocados.
La madrugada siguió con nuevas salidas en un lapso corto. A las 2:53, se registró un incendio en el barrio 28 de Junio, en cercanías de las casas tuteladas, y luego, a las 3:54, se trabajó sobre otro foco en Fontana y la costanera. La seguidilla obligó a sostener guardias activas y recorridas, con intervenciones que buscaron cortar la propagación en zonas cercanas a viviendas.
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El mismo sector de Fontana y costanera volvió a demandar presencia. A las 5:26, los bomberos regresaron por otro incendio en ese punto, con una repetición que llamó la atención por la cercanía temporal. En este tipo de episodios, la rapidez resulta determinante porque el pastizal seco y el viento pueden acelerar el avance del fuego hacia áreas más sensibles.
Desde el cuartel informaron que, por las características de los focos y por la reiteración en intervalos cortos, se presume que varios incendios fueron intencionales. Esa evaluación se apoya en la sucesión de puntos distintos, en horarios de madrugada y en la repetición en sectores ya intervenidos. En todos los casos, las dotaciones lograron extinguir las llamas antes de que ganaran magnitud.
A pesar de la intensidad de la noche, el balance dejó un dato positivo: no se registraron personas heridas ni pérdidas materiales en Esquel, según lo informado desde el cuartel. De todos modos, las autoridades remarcaron la importancia de extremar cuidados durante jornadas festivas, cuando se multiplican las reuniones y los desplazamientos, y de denunciar cualquier situación sospechosa que pueda terminar en un foco de incendio.
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