RODRIGO COLIHUINCA: UN HOMBRE CONFESÓ EL CRIMEN

Este martes, un hombre se presentó en la comisaría Segunda de Trelew, afirmando ser el asesino de Rodrigo Colihuinca, el adolescente cuyo cuerpo mutilado fue encontrado descuartizado hace 12 años en un baldío del barrio Malvinas Argentinas.

El fiscal de turno Gustavo Núñez, en dialogó con #LA17 confirmó la información.

Se trata de un sujeto de 29 años, quien según declaraciones del fiscal Núñez, había confesado por propia decisión, haber estado implicado en la causa.

Se entregó ayer en la comisaría 2da de Trelew. Se realizan allanamientos durante la mañana de este miércoles.

El hombre habría confesando ser el autor del brutal asesinato de Rodrigo Colihuinca ocurrido hace 12 años. Las autoridades judiciales  investigan la veracidad de su declaración.

La justicia y la policía tomaron la determinación de dejar demorado al hombre, mientras se investiga su estado mental para determinar si está en sus cabales o si se trata de una persona con problemas psiquiátricos. Sin embargo, esto podría dar luz a un crimen que lleva 12 años y no se ha logrado esclarecer.

En el marco de la investigación, tres efectivos de la Policía escucharon las primeras declaraciones de un hombre de 29 años, quien reveló detalles del hecho de sangre. Además, la Policía realizó una diligencia de allanamiento en una vivienda ubicada en la calle Río Negro al 300, en el barrio Menfa de Trelew, buscando más evidencia en el caso ocurrido hace 12 años.

El fiscal Gustavo Núñez confirmó a #LA17  estuvo implicado en la causa. Señaló que el caso no prescribió y que se trata de un “homicidio criminis causa”. En caso de que se demuestre la autoría del crimen, le cabría una pena de prisión perpetua.

La familia de Rodrigo   

Desde el programa el "Quinto Poder" por #LA17  Juan Colihuinca, padre de la víctima, manifestó que lo notificaron de la presentación del supuesto autor y cree que "dice la verdad porque el hombre había  sido mencionado en la primera etapa de la investigación".

“No creo que una persona que no tenga nada que ver, se vaya a presentar a más de 12 años de la muerte de mi hijo”, aseguró.

"Habrá que ver por qué no se siguió esa línea" dijo con tono de reproche el dolorido padre, quien desde hace unos años, contó que reside en su pueblo natal, Paso de Indios.

"En su momento nadie nos acompañó, se nos discrimino por el apellido" dijo el hombre sollozando  y recordó las palabras de la fiscal de entonces Mirtha Moreno  "no hace falta ir al lugar de los hechos" contó que le dijo la fiscal entonces "usted pretende tener respuesta en tres meses" dijo Colihuinca.

A pesar de los avances en la investigación, la familia de Rodrigo aún espera justicia. Más de una década después del crimen, el caso sigue sin resolverse, dejando a la comunidad en busca de respuestas y justicia para un joven cuya vida fue trágicamente interrumpida.

RECONOCIMIENTO A PERSONAL POLICIAL POR SU LABOR EN HECHOS DESTACADOS

El Hecho

15 de marzo de 2012: Rodrigo Colihuinca, de 17 años, salió de su casa alrededor de las 15:00 para dirigirse a la escuela donde estudiaba. Lo que parecía una rutina diaria se convirtió en el inicio de una tragedia.

17 de marzo de 2012: Dos días después de su desaparición, su padre se presentó en la Fiscalía local, donde le mostraron unas prendas que reconoció como pertenecientes a su hijo. La noticia fue devastadora: el cuerpo de Rodrigo había sido encontrado la tarde anterior en un descampado cerca del barrio Malvinas Argentinas.

El hallazgo del cuerpo de Rodrigo reveló una escena de horror. Los restos del joven mostraban signos de un ataque brutal, incluyendo la decapitación y la mutilación de partes de su cuerpo. El personal de Criminalística trabajó en el sitio hasta que la luz solar se lo permitió, retomando las labores al día siguiente alrededor de las 9:45. Sin embargo, esta pausa en la investigación fue severamente criticada por los familiares de Rodrigo, quienes cuestionaron la falta de preservación del lugar donde fue hallado el cuerpo.

A pesar de los allanamientos realizados a tres sospechosos, las autoridades no procedieron a indagarlos. Más de una década después del crimen, el caso sigue sin resolverse. La familia de Rodrigo aún espera justicia, mientras el responsable o los responsables de este atroz crimen permanecen en la impunidad.

El caso de Rodrigo Colihuinca es un doloroso recordatorio de los desafíos y deficiencias en el sistema de justicia, dejando a una familia y a una comunidad en busca de respuestas y justicia para un joven cuya vida fue trágicamente interrumpida.