


El Astillero Naval Federico Contessi celebró la botadura del buque “Marlene del Carmen” en Mar del Plata. Se trata de un fresquero de altura que reemplazará al veterano “María Rita”. El acto se realizó en un contexto de incertidumbre para la industria naval y pesquera.


El nuevo barco mide 25,50 metros de eslora y está construido en acero y aluminio. Cumple con altos estándares de seguridad y eficiencia. A pesar de su tecnología, la rentabilidad del sector sigue en crisis.
Domingo Contessi, presidente del astillero, advirtió sobre la situación del sector. “La pesca argentina es una, pero no es toda igual”, expresó. Señaló que muchas plantas procesadoras están cerrando y que la flota opera con pérdidas.
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Los costos operativos aumentaron y la competitividad del sector se redujo. “Nos prometieron que las microempresas eficientes sobrevivirían, pero eso no se cumple”, criticó Contessi. La rentabilidad de los fresqueros está en su punto más bajo.
El empresario pidió medidas urgentes para evitar el colapso del sector. Destacó que es necesario recuperar la competitividad con mayor desregulación. También reclamó una agenda común entre las cámaras pesqueras.
La botadura contó con la presencia de funcionarios y referentes del sector. Estuvieron el vicegobernador de Chubut, Gustavo Menna, y la diputada María Cecilia Ibañez. También asistieron dirigentes de la industria naval.
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El evento puso en evidencia la necesidad de soluciones concretas. Los pesqueros fresqueros enfrentan un futuro incierto sin cambios en la política sectorial. Las cámaras pesqueras buscan acordar medidas para sostener la actividad.
La industria naval sigue apostando a la renovación de su flota. El “Marlene del Carmen” es un avance en tecnología y seguridad. Sin embargo, el contexto económico pone en riesgo la continuidad de la actividad.









