


Marc Márquez dominó la Sprint Race en Termas de Río Hondo con una actuación impecable. Desde la pole, impuso un ritmo demoledor y no dio opciones a sus rivales. La lluvia apareció en la cuarta vuelta, pero el español se mantuvo firme y selló una victoria contundente.


El inicio fue arrollador para Márquez, quien aprovechó su posición de privilegio. Tomó la delantera en la primera curva y rápidamente abrió una ventaja considerable. Sus perseguidores intentaron seguirlo, pero el ritmo del múltiple campeón fue inalcanzable.
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Cuando la lluvia se hizo presente, el trazado se volvió peligroso y puso a prueba la habilidad de los pilotos. La experiencia de Márquez se hizo notar cuando controló cada derrape con precisión. Álex Márquez, su hermano, aprovechó el cambio de condiciones y se acercó peligrosamente.
Los Márquez brindaron un espectáculo atrapante con un duelo ajustado. Durante varias vueltas, Álex presionó sin descanso y buscó el sobrepaso. Sin embargo, Marc cerró todos los espacios con maniobras impecables.
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Francesco Bagnaia aseguró el tercer puesto, pero sin posibilidades reales de luchar por más. El italiano intentó acercarse a los líderes, pero la diferencia fue insalvable. Johann Zarco lo presionó en el final, pero no logró superarlo.
El rendimiento de Marc Márquez fue impecable de principio a fin. Esta victoria le otorga doce puntos y refuerza su candidatura en el campeonato.
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Los fanáticos aguardan con expectativa la carrera del domingo. La gran final se disputará a las 15 horas, con Márquez nuevamente en el centro de la escena. Sus rivales intentarán quebrar su dominio, pero el español llega con confianza absoluta.











