


La Brigada de Explosivos de la Policía de Río Negro confirmó la presencia de cables de detonación. El material se encontraba enterrado a distintos niveles de profundidad, lo que indica la posible existencia de explosivos activos.
El hallazgo ocurrió esta mañana, durante tareas de movimiento de suelo. Personal técnico de una firma minera detectó los cables en una zona de bardas, a unos 10 kilómetros del aeropuerto local. La zona quedó cercada para impedir el ingreso de personas. Vallas, cintas y personal especializado resguardan el perímetro.
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La policía, bomberos y el área de Minería de la Provincia trabajan con extrema precaución. Utilizan detectores de metales y otras herramientas para ubicar cargas enterradas hasta 20 metros bajo tierra.
Los cables presentan signos de antigüedad y podrían pertenecer a operaciones abandonadas hace años. Hasta el momento, no aparece información sobre qué empresas realizaron explosiones en ese sector. Las excavaciones ya alcanzaron los cinco metros de profundidad. Los especialistas aún no acceden al final de las líneas, donde podrían encontrarse los explosivos.
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“Los cables de detonación no dejan lugar a dudas”, señalaron desde la Unidad 47 de la policía. El operativo de desactivación podría extenderse varios días. La peligrosidad del material obliga a un trabajo lento y meticuloso.
La comunidad de Roca sigue con atención cada parte oficial. La cercanía con zonas habitadas eleva la preocupación. Las autoridades exigen responsabilidad ambiental y respuestas por parte del sector minero. El pasivo hallado plantea interrogantes graves sobre controles y registros de actividad extractiva.
Fuente: NoticiasNet







