

Luis “Beto” Crespo fue homenajeado por su trayectoria al frente de la vidriería Aonikenk
Chubut30/04/2025

Luis Roberto Crespo —más conocido como “Beto”— no imaginaba que su presencia en EVENPa 2025 terminaría con aplausos, abrazos y una sorpresa que lo emocionó profundamente. Fundador de la vidriería Aonikenk, y ya jubilado, fue homenajeado por su aporte a la comunidad local y por haber forjado, desde el trabajo cotidiano, una empresa familiar que hoy continúa en manos de sus hijos.
“No lo esperaba”, confesó Crespo, visiblemente emocionado, al referirse al reconocimiento impulsado por sus hijos, trabajadores y amigos. El acto tuvo lugar en el propio stand de Aonikenk dentro de la feria, donde su historia se entrelazó con la de Puerto Madryn. “Vinimos a mirar, no sabía que me habían preparado todo esto”, agregó.
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La historia de Aoniken comenzó casi por casualidad, cuando Crespo adquirió un pequeño stock de vidrio sin imaginar que ese primer paso se transformaría en un oficio para toda la vida. “No fue como abrir un kiosco. Empezamos a los porrazos, con más momentos difíciles que fáciles”, relató con honestidad.
A lo largo de los años, la vidriería se consolidó, creció y se transformó en una empresa familiar. Hoy, sus cuatro hijos —Pamela, Chanina, Matías y Lautaro— trabajan allí, cada uno desde un rol diferente. “Nunca los obligué. Ellos fueron aprendiendo, se involucraron, y en un momento me dijeron: ‘Viejo, hasta acá llegaste’”, contó entre risas.
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Aonikenk, cuyo nombre proviene de la cultura tehuelche, fue elegido por Crespo en contraposición a la tendencia de nombres en inglés. La elección estuvo inspirada en una audición radial del recordado locutor Jiménez Agüero. El diseño del logotipo también fue una creación compartida: “Lo armé con ayuda de alguien que sabía hacer letras, tomamos algo del estilo de ATC y los colores se dieron por casualidad, a partir del color de una camioneta”.
Hoy, aunque retirado de la actividad diaria, Crespo sigue cerca de su familia y de su antigua pasión. “Todavía no me cae del todo que me jubilé. Me ocupo de mis nietas y a veces, si me preguntan algo, les doy una mano. Pero los chicos ya saben más que yo”, admitió con orgullo.







