Kamala Harris reapareció en público y advirtió por una posible “crisis constitucional” en EEUU

La ex vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, reapareció con un fuerte mensaje político al advertir sobre un posible colapso institucional en su país. Durante una gala en California, Harris sostuvo que la democracia estadounidense “está al borde de una crisis constitucional”. La intervención coincidió con los 100 días del regreso de Donald Trump a la presidencia.

“Los pesos y contrapesos que sostienen a nuestra democracia empezaron a ceder”, expresó Harris, según declaraciones recogidas por DW. La exfuncionaria alertó sobre el deterioro del equilibrio entre poderes y apuntó que, de profundizarse, podría darse una ruptura formal del orden constitucional. Sus palabras marcan su regreso al debate público tras varios meses de silencio.

Harris había mantenido un bajo perfil tras su derrota electoral, pero eligió el momento simbólico del centésimo día del mandato de Trump para reaparecer. Según analistas, su mensaje busca recuperar centralidad en la política demócrata. La exvicepresidenta mantiene un alto reconocimiento en sectores progresistas, aunque con limitada proyección electoral.

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“Cuando el Congreso no cumple con su función, o la Corte falla en la suya, o el Presidente los desafía igualmente, eso es una crisis constitucional”, señaló con firmeza. Su intervención generó eco entre activistas demócratas y fue replicada en redes sociales. Harris enfatizó que la situación actual pone en riesgo principios fundantes del sistema republicano.

La dirigente demócrata acusó directamente a Trump de haber “abandonado los valores de igualdad y derechos inalienables”. También denunció una agenda gubernamental centrada en beneficiar a los sectores más ricos, privatizar la salud y reducir la inversión en educación pública. Sus críticas apuntan a delinear un frente opositor con eje en la justicia social.

Pese al tono crítico, Harris valoró “el coraje de quienes se están organizando para resistir al trumpismo”. Reconoció a activistas y políticos que, desde distintos espacios, expresan su desacuerdo con las políticas del nuevo gobierno. El mensaje buscó transmitir ánimo y convocatoria en un contexto adverso para la oposición.

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“Este país es de nosotros, no de quienes ocupan la Casa Blanca”, remarcó Harris en el cierre de su discurso. La frase fue interpretada como un llamado a la movilización democrática frente a lo que considera un riesgo institucional. Su tono combinó denuncia, memoria política y proyección hacia el futuro.

Fuente: NA.