Qué significa la palabra Eternauta, que se volvió símbolo y es un éxito en Netflix

Con el estreno global de El Eternauta en Netflix, la icónica historieta argentina creada por Héctor Germán Oesterheld y Francisco Solano López volvió a instalarse en el centro del debate cultural. La serie protagonizada por Ricardo Darín reinterpreta la historia original en una Buenos Aires contemporánea atravesada por una nevada mortal y una invasión extraterrestre. Pero más allá del relato, una pregunta simple empezó a circular: ¿Qué significa realmente “Eternauta”?

La respuesta, lejos de ser anecdótica, es profundamente reveladora. “Eternauta” es una palabra construida, no heredada, compuesta por la raíz “eter-”, vinculada al éter o a lo eterno, y el sufijo “-nauta”, derivado del griego nautēs, que significa navegante. El Eternauta es, entonces, un “viajero de la eternidad”, un navegante del tiempo más allá de los límites del presente.

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Pero no se trata de un viajero voluntario. Juan Salvo, el protagonista, no explora lo desconocido por deseo o curiosidad, sino por necesidad. El tiempo y el espacio lo arrastran a una odisea impuesta, mientras intenta reencontrarse con su familia en un mundo que se desmorona. Su viaje no es solitario: es un proceso colectivo, una epopeya compartida con otros hombres y mujeres comunes que luchan por sobrevivir y encontrar sentido en medio del desastre.

Martín M. Oesterheld, nieto del autor y consultor creativo de la serie, define al personaje como “un héroe colectivo”, figura central de una historia donde la épica no está en el individuo excepcional, sino en la acción solidaria y organizada de quienes resisten juntos.

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Eternauta no es solo un concepto lingüístico, sino también una identidad política y cultural. La historia publicada en 1957 cobró otra dimensión durante y después de la última dictadura militar en Argentina, cuando Oesterheld fue desaparecido junto con sus cuatro hijas. La historieta pasó a leerse como una metáfora de la represión estatal y sus personajes como símbolos de la militancia, la lucha y la resistencia frente al terror.

En ese contexto, El Eternauta se transformó en un emblema de quienes enfrentan lo extraordinario sin superpoderes, con coraje civil, con compañerismo, con dolor y con memoria.

Fuente: Infobae