Paro total en Tierra del Fuego por la baja de aranceles

Actualidad21/05/2025REDACCIÓNREDACCIÓN
Empresas en Tierra del Fuego foto Infonegocio
Empresas en Tierra del Fuego foto Infonegocio

Tierra del Fuego vive una jornada de paro total tras la decisión del Gobierno nacional de reducir aranceles e impuestos internos a productos electrónicos importados, una medida que impacta de lleno en la industria radicada en la isla. La protesta se produce una semana después del inicio de la huelga en las principales plantas de ensamblado de celulares, televisores y aires acondicionados.

Las primeras en detener la producción fueron las fábricas de Newsan, Mirgor, Solnik, Radio Victoria, BGH y Midea Carrier, localizadas en Río Grande y Ushuaia, donde se ensamblan marcas como Motorola, Samsung, Xiaomi, TCL y Alcatel, entre otras. En conjunto, estas plantas produjeron en 2024 más de 5,5 millones de celulares, superando ampliamente la fabricación de televisores (2 millones) y aires acondicionados (1 millón).


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La Unión Obrera Metalúrgica (UOM) lidera la resistencia gremial desde el miércoles pasado, y este miércoles la protesta se amplió a través de un paro general de 24 horas con la adhesión de docentes, estatales nucleados en ATE y el gremio de Camioneros, lo que también afectó la logística y el transporte.

El conflicto se originó tras la publicación en el Boletín Oficial de la rebaja de aranceles de importación del 16% al 0% en dos etapas (una este miércoles y otra el 15 de enero), junto con una reducción de los impuestos internos del 19,5% al 9,5% para productos importados. En contraste, la industria nacional, que ensambla con kits libres de arancel, no recibirá beneficios equivalentes, lo que, según advierten las cámaras empresarias, desequilibra la competencia.


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La cámara Afarte denunció que la medida favorece a los importadores en detrimento de la producción local, mientras el gremio metalúrgico remarcó que están en juego más de 8.500 puestos de trabajo directos, además de los empleos indirectos vinculados al ecosistema productivo y comercial de la isla.

Desde el gobierno provincial, el gobernador Gustavo Melella criticó la decisión de Nación y reafirmó su respaldo a los trabajadores. “Se pone en riesgo la producción y la estabilidad de miles de familias. Nuestro compromiso es contener a quienes hoy están en incertidumbre”, expresó.


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Por su parte, el intendente de Río Grande, Martín Perez, acusó al gobierno nacional de querer "desmantelar el régimen fueguino", y sostuvo que la eliminación del arancel del 16% es “un golpe directo a la matriz productiva”. En el mismo sentido se pronunció la senadora Cristina López, quien afirmó que la rebaja impositiva “responde más a las exigencias del FMI que a las necesidades del pueblo”.

En medio del conflicto, Oscar Martínez, secretario general de la UOM Río Grande, cruzó al ministro de Desregulación, Federico Sturzenegger, por sus declaraciones irónicas sobre convertir la isla en un parque de diversiones. “Estamos defendiendo soberanía y trabajo, no un decorado turístico”, señaló el dirigente.


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Mientras el Gobierno nacional insiste en que las medidas buscan reducir precios al consumidor y favorecer la competencia, en Tierra del Fuego crece la preocupación por el impacto económico y social que puede generar esta política. El régimen de promoción industrial vigente, con beneficios fiscales prorrogados hasta 2038 (y posibilidad de extenderse hasta 2053), representa un costo fiscal superior a los US$ 1.000 millones anuales, según estimaciones de Fundar.

Fuente: Infofueguina, El Diario del Fin del Mundo, Clarín, Infobae

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