Crece el río Azul un 45 % y temen desbordes por las lluvias extremas en Lago Puelo

Las intensas lluvias no dan tregua en Lago Puelo, que se encuentra bajo alerta naranja del Servicio Meteorológico Nacional. Las precipitaciones acumuladas ya superan los 41 milímetros y podrían continuar al menos hasta el miércoles, con picos más intensos durante la tarde del martes.

Uno de los focos más preocupantes es el río Azul, cuyo caudal aumentó un 45 % tras semanas de niveles históricamente bajos. La crecida encendió las alarmas en el casco urbano, en las zonas ribereñas y en áreas altas como Las Golondrinas, donde incluso se espera la caída de nieve en las próximas horas.

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“Estamos monitoreando todos los sectores vulnerables para evitar anegamientos y asistir de inmediato si hace falta”, declaró Julián Cayún, director de Protección Civil. El funcionario también informó que ya se han registrado 41,2 mm de lluvia, cifra que podría incrementarse rápidamente con el nuevo frente húmedo.

La situación complica la circulación vehicular en rutas clave como la 45 y la 16, muy utilizadas durante horarios escolares. Por eso, se trabaja junto a Vialidad Provincial para reforzar la señalización y mejorar la seguridad vial, especialmente ante los bancos de niebla y el agua acumulada sobre la calzada.

“Pedimos a los vecinos circular con mucha precaución, bajar la velocidad y mantener distancia”, insistió Cayún, quien señaló que la visibilidad se reduce drásticamente por momentos y los tiempos de frenado se alargan.

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El monitoreo de las autoridades se extenderá durante toda la semana. Patrullas recorren las zonas más expuestas para prevenir emergencias y asistir a quienes lo necesiten. Las tareas incluyen controles constantes en zonas urbanas, pero también en parajes rurales donde el acceso podría dificultarse si las lluvias continúan al ritmo actual.

Según los pronósticos, no se descartan tormentas localmente fuertes que agraven aún más el panorama hídrico. Los equipos de Protección Civil se mantienen en estado de alerta y coordinan acciones preventivas con bomberos y áreas municipales.

Mientras tanto, la población sigue atenta a los partes oficiales. Muchos vecinos de zonas cercanas al río Azul ya preparan medidas de contingencia por temor a posibles desbordes, sobre todo durante las noches, cuando las lluvias aumentan su intensidad.