Victoria de peso que pone a Deportivo Madryn segundo y se ilusiona

Deportivo Madryn logró una victoria contundente ante Quilmes por 3-1 y se consolidó como único escolta del líder Atlanta en la Primera Nacional. El partido, correspondiente a la fecha 20 y postergado por nieve, se disputó finalmente con una gran actuación del equipo dirigido por Leandro Gracián. Con goles de Bruno Pérez, Diego Crego y Nicolás Mana, el conjunto chubutense continúa su camino ascendente.

Desde el arranque, Madryn salió con decisión y presión alta, imponiendo su ritmo ante un Quilmes que no logró afirmarse. El gol de apertura llegó temprano gracias a un fuerte disparo de Bruno Pérez, que se desvió levemente y dejó sin chances al arquero Glellel. Ese tanto marcó el rumbo del partido y le dio confianza al Aurinegro.

El segundo gol no tardó en llegar y fue el resultado de una jugada colectiva bien construida. Pérez volvió a ser protagonista al desbordar y asistir a Diego Crego, quien marcó de cabeza. Quilmes, desconectado, no encontraba los espacios para lastimar en campo rival.

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En el complemento, Duscher intentó reacomodar al equipo con tres variantes ofensivas. Ramiro Martínez, una de las caras nuevas en la cancha, obligó dos veces a intervenir a Bonnin con remates peligrosos. Quilmes mostró otra actitud, pero seguía sin claridad en los últimos metros.

La reacción del Cervecero llegó recién a los 26 minutos del segundo tiempo, cuando Bindella metió un centro preciso y Martínez conectó de cabeza para el 2-1. El descuento abrió una ventana de esperanza para la visita. Madryn, sin embargo, no perdió la calma ni su orden táctico.

Gracián respondió con cambios acertados que le dieron aire al equipo. Ingresaron Montagna y Nicolás Mana, quienes renovaron el ataque aurinegro. El equipo volvió a tener presencia en el área rival.

Cuando Quilmes buscaba el empate, Madryn liquidó el encuentro con una jugada rápida. Mana presionó alto, robó una pelota y definió mano a mano ante Glellel. El 3-1 sentenció el partido y desató el festejo local.

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En los últimos minutos, Quilmes encontró el gol, pero fue anulado por posición adelantada. Capano había definido tras un rebote, pero el asistente levantó la bandera. La jugada generó protestas, pero la decisión fue firme.

Con este triunfo, Deportivo Madryn estiró a once su invicto, con siete triunfos y cuatro empates. Suma 40 puntos y quedó a solo dos del líder Atlanta, con un rendimiento que entusiasma. El próximo compromiso será este domingo, como visitante ante Güemes.

Leandro Gracián, conforme con el rendimiento, destacó el equilibrio del equipo: “Supimos cuándo atacar y cuándo sostener el resultado. Este grupo no deja de sorprenderme”. Madryn sigue firme, soñando con la cima de la tabla.