Sin goles, pero con esperanza: Círculo Deportivo y Guillermo Brown siguen en carrera

En una tarde tensa y con poco vuelo futbolístico, Círculo Deportivo y Guillermo Brown empataron 0 a 0 en Otamendi, en el marco de la Reválida del Torneo Federal A. El encuentro, jugado en el estadio Guillermo Trama, fue trabado desde el inicio, con escasas situaciones de peligro real para los arcos. El resultado, aunque poco atractivo, permite a ambos equipos seguir sumando y conservar esperanzas de clasificación.

Durante la primera mitad, el juego fue chato y con pocas luces, donde la mitad de la cancha fue el escenario de la mayor parte de las acciones. Los equipos no lograron hilvanar jugadas claras ni imponer condiciones. Recién a los 20 minutos se produjeron las primeras emociones, cuando ambos arqueros debieron responder con grandes atajadas.

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Iván Bravo fue el protagonista de la situación más clara de esa etapa, con dos remates consecutivos desde afuera del área que exigieron una gran respuesta del arquero rival. Aunque el volante mostró decisión, la falta de juego asociado le impidió a Círculo generar más peligro real. En ese contexto, el empate parecía el único destino posible.

El equipo local buscó a Makarte como eje creativo, intentando generar a partir de su movilidad, pero le faltó precisión en los metros finales. La defensa de Brown se mantuvo firme y bien parada, neutralizando los intentos del Papero. Así, el primer tiempo se fue sin emociones profundas y con más empuje que fútbol.

Ya en el complemento, el DT de Guillermo Brown, Emanuel Trípodi, decidió hacer cuatro cambios de arranque, claramente insatisfecho con lo que veía. Uno de los ingresados, Marcos Giménez, estuvo a centímetros de abrir el marcador con un remate potente que reventó el palo y cruzó todo el arco sin entrar. Fue la jugada más clara del partido.

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A partir de ese momento, el juego se volvió más dinámico, aunque sin grandes riesgos para ninguno de los dos equipos. Círculo intentó generar peligro mediante centros y tiros desde media distancia, pero el arquero visitante respondió siempre con solvencia. Brown, por su parte, esperó ordenado y buscó lastimar de contra, sin éxito.

El empate dejó sensaciones encontradas: por un lado, la frustración de no haber roto el cero; por otro, la tranquilidad de no haber perdido. Para Círculo, el dato positivo es que, desde la llegada de Diego Cochas como entrenador, el equipo aún no recibió goles y sigue sumando. Ya son tres partidos sin derrotas, con una victoria y dos empates.

Guillermo Brown, mientras tanto, mantiene la ilusión intacta y se prepara para el próximo compromiso como local ante San Martín de Mendoza. Jugará en el estadio Raúl Conti, donde espera dar un paso firme hacia la clasificación. El equipo de Trípodi sabe que todavía hay margen para mejorar.