
Jubilados destinan hasta el 14% de su ingreso al pago de la luz en la era Milei
Actualidad17/08/2025
Sergio Bustos
El impacto de las tarifas de electricidad sobre los ingresos de los jubilados volvió a quedar en evidencia con un nuevo informe. Hoy, un jubilado que cobra la mínima gasta el 14,21% de sus ingresos solo para pagar la luz, casi el triple de lo que destinaba hace nueve meses.


El estudio fue realizado por la ONG Defensa de Usuarios y Consumidores (DEUCO) y toma como referencia tres tipos de consumo mensual: 150, 350 y 500 kwh. El promedio utilizado ubica al jubilado en el nivel 2 de la segmentación tarifaria, que contempla el mayor subsidio.
El contraste con el año pasado es contundente. En noviembre de 2023, la jubilación mínima era de $110.558 y el gasto en electricidad equivalía al 4,72%. Hoy, con una mínima de $309.293 más un bono de $70.000, ese porcentaje llega al 14,21% para quienes consumen 500 kwh.
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El salto implica que un jubilado destina $43.670 solo en electricidad, contra $5.219 en noviembre de 2023. El aumento es tan fuerte que incluso en consumos más bajos la presión es evidente.
Para quienes consumen 350 kwh, la proporción de ingreso destinada a la tarifa eléctrica asciende al 5,94%, cuando el año pasado era del 3,9%. En tanto, para 150 kwh, el gasto pasó del 1,11% al 2,55%, lo que implica que hasta el consumo más moderado se duplicó.
DEUCO fue categórica en su informe. “El sector de la sociedad argentina más castigado por el ajuste del gobierno de Milei son los jubilados, cualquiera sea su nivel de ingresos”, sostuvo la organización.
El panorama se agrava porque la suba de tarifas convive con ingresos que no logran seguir el mismo ritmo. El Gobierno anunció esta semana un aumento del 1,9% en jubilaciones, pensiones y asignaciones, en línea con la inflación de julio medida por el INDEC.
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Con este ajuste, la jubilación mínima pasará a $320.220 en septiembre. La Pensión Universal para el Adulto Mayor quedará en $256.150 y la Pensión No Contributiva en $224.123. Pero los especialistas advierten que los incrementos no alcanzan para compensar el peso de las facturas de servicios.
La tensión política también atraviesa la discusión. El aumento por decreto llega pocos días después del veto presidencial a la suba aprobada por el Congreso, lo que desató críticas en la oposición y generó nuevas movilizaciones de jubilados.
Los centros de jubilados y asociaciones de defensa de consumidores remarcan que la situación es insostenible. “El ajuste impacta directamente en quienes menos margen tienen para absorberlo”, afirman desde DEUCO.
La realidad muestra que el gasto en servicios esenciales crece más rápido que los ingresos. El presupuesto de los jubilados, que ya se ve afectado por los precios de medicamentos y alimentos, ahora debe contemplar un aumento exponencial de las tarifas de luz.
El informe también reaviva el debate sobre la política de subsidios energéticos. Mientras el Gobierno insiste en reducirlos, los números revelan que el costo social recae con mayor peso sobre los sectores más vulnerables.
Cada nueva boleta de luz se convierte en un recordatorio del ajuste y de la brecha creciente entre tarifas y haberes. Los jubilados, una vez más, quedan en el centro de una discusión que combina economía, política y derechos sociales.
















