Deportivo Madryn superó 1-0 a Los Andes.
Deportivo Madryn consiguió una victoria fundamental en casa y volvió a lo más alto del Grupo A de la Primera Nacional. Con golazo incluido, venció por 1-0 a Los Andes en un Estadio Abel Sastre que lució repleto y vibrante. El equipo del sur mantiene vivo su sueño de llegar a la Liga Profesional.
El único tanto del partido lo marcó Diego Martínez a los 2 minutos del segundo tiempo, con un remate imposible desde más de 30 metros. El lateral izquierdo sorprendió a todos y colgó la pelota del ángulo derecho del arquero Sebastián López. Fue una joya que desató el delirio de la hinchada.
Madryn había avisado en el primer tiempo con un intento de Recalde que se fue alto. Pero el encuentro cambió por completo a los 19 minutos, cuando Matías Gómez agredió a Nazareno Solís. El árbitro Joaquín Gil no dudó y expulsó al volante de Los Andes por conducta violenta.
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El golpe de escena parecía abrirle el camino al local, pero el partido siguió parejo. Los Andes, con diez hombres, se plantó con dignidad y complicó más de la cuenta. El Aurinegro no logró traducir su dominio en goles.
Tras el gol, Madryn intentó manejar los tiempos, pero no logró tranquilidad. Los Andes se animó, se adelantó en el campo y empezó a presionar. Solís tuvo que salir por un golpe que pasó desapercibido para el juez.
Gracián ajustó el equipo con los ingresos de Mana y Yossen, buscando piernas frescas y mayor control. Aun así, el equipo visitante no se rindió y encontró una chance clara con Asenjo. A los 43, el delantero marcó de cabeza, pero el árbitro anuló por una clara falta en ataque.
El cierre fue de alto voltaje. En la última jugada, hasta el arquero Sebastián López fue a buscar el empate en un tiro de esquina. En la contra, Silva tuvo el segundo con el arco vacío, pero un defensor evitó el gol sobre la línea.
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Con el pitazo final, Madryn desató el festejo. El equipo ganó un partido muy duro, que necesitaba ganar sí o sí. El público reconoció el esfuerzo y celebró junto al plantel.
El triunfo dejó a Deportivo Madryn nuevamente en lo más alto del Grupo A, en plena pelea por el ascenso directo. Quedan pocas fechas y cada punto vale oro. El equipo se mantiene firme en su objetivo.
El entrenador Leandro Gracián destacó la entrega de sus jugadores. La ilusión crece en Madryn.
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