Karate imagen ilustrativa fuente Freepik
“Chubut tuvo uno de sus referentes que trajo un bronce”, contó Héctor Agustinho al repasar la participación de la delegación provincial en el Panamericano de Asunción. En diálogo con La Segunda Mañana por #LA17, el referente de la Escuela de Karate de Puerto Madryn resaltó que llegar a la selección argentina requiere un extenso circuito de torneos y que los jóvenes lograron una experiencia única en el exterior.
El instructor detalló que la provincia estuvo representada en cuatro competencias internacionales, entre ellas el Sudamericano donde “Franco Moroncini se trajo un oro”, y el 34° Campeonato Panamericano de karate. Allí compitieron Franco Moroncini, Máximo Vallogia y otros atletas locales, quienes sumaron rondas ganadas y dejaron en alto el nivel técnico de la disciplina en la región.
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Agustinho subrayó la importancia del acompañamiento institucional y social. “El profundo agradecimiento a provincia, municipio y comunidad de Puerto Madryn, porque sin ellos sería imposible”, expresó, al remarcar también la difusión de los medios de comunicación. Explicó que el karate local transita tanto la modalidad tradicional como la deportiva, lo que amplía el horizonte competitivo de los practicantes.
Sobre el presente de los jóvenes, destacó que tras regresar de Asunción, los atletas volvieron a brillar en el plano nacional. “Máximo quedó campeón nacional en Córdoba y Iara logró el subcampeonato”, señaló, sumando además que Chubut obtuvo entre 10 y 12 medallas de ranking en el último certamen.
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El camino hacia los Juegos Evita es otro objetivo inmediato. La delegación provincial viajará a Mar del Plata con cerca de mil personas y Puerto Madryn aportará competidores destacados. “Máximo Vallogia será uno de los representantes en combate”, comentó Agustinho, recordando que viene de consagrarse campeón nacional días atrás.
El instructor explicó que el sistema de competencia en los Evita es altamente exigente. “Es un todos contra todos donde solo el primero avanza”, precisó, describiendo la dificultad de alcanzar las instancias finales. Pese a ello, confió en el potencial de los atletas formados en la provincia.
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Más allá de las medallas, Agustinho resaltó el valor formativo de la práctica. “Me apasiona el karate y me encanta guiar a los chicos en lo deportivo y en la vida”, dijo. Para él, la tarea de los técnicos no se limita a lo físico, sino que también acompaña procesos personales en la adolescencia y fortalece la confianza de los practicantes.
La Escuela de Karate de Puerto Madryn celebró recientemente sus 40 años de trayectoria, consolidando un trabajo que se extendió a nivel provincial. “Hemos estado en mundiales, panamericanos y sudamericanos, hoy seguimos acompañando desde la federación y el área de deportes”, expresó con orgullo.
El instructor concluyó que la disciplina contribuye a la formación integral de quienes la practican. “Siempre va a sumar, ya sea en un deporte federado, de club o de barrio”, afirmó, convencido de que cada instancia aporta valores y aprendizajes que trascienden la competencia.
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