Diarco baja sus persianas y despide empleados en todo el país

Actualidad18/10/2025

Diarco cerró 9 sucursales en los últimos meses, dejando a cientos de empleados sin trabajo.

El panorama para las cadenas de autoservicios en Argentina sigue siendo sombrío. En los últimos meses, Diarco, una de las empresas más reconocidas del sector, cerró 9 de sus sucursales en distintas provincias del país. Los motivos son claros: la caída en el consumo, el aumento de alquileres y el encarecimiento de los servicios. Diarco, que llegó a tener presencia en más de 15 provincias, comenzó un proceso de ajuste que se traduce en despidos masivos y una reestructuración que afecta a cientos de empleados.

La historia de Ricardo Goldfard, dueño de Diarco, es la de un empresario que, tras años de crecimiento, se encontró con un escenario económico más adverso de lo esperado. Goldfard expresó sin rodeos en entrevistas que el panorama no mejoró como esperaba. En una de sus últimas declaraciones, llegó a decir: "las ventas van para el tujes".

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El golpe fue particularmente fuerte en Berazategui y Remedios de Escalada, donde se cerraron locales en mayo de 2024, con el despido de 25 personas. No mucho después, en Bolívar, un autoservicio inaugurado solo 8 meses antes de su cierre fue otra de las sorpresas. La misma suerte corrieron los locales en Corrientes y Chaco, donde se despidieron a más de 100 empleados en total.

Las declaraciones de los trabajadores no dejan de ser dramáticas. Hugo Aguado, secretario general del Centro de Empleados de Comercio de Sáenz Peña, relató el desolador panorama vivido en el cierre del Diarco de Sáenz Peña en Chaco: "Muchos de los trabajadores estaban consternados y lloraban al enterarse que se quedaban de manera definitiva sin su fuente laboral".

Esta angustia se replicó en otras localidades como Concordia y Balvanera, donde, además de los despidos, los empleados enfrentan la incertidumbre de un mercado laboral que no ofrece alternativas claras.

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"Las ventas no hacían sostenible el negocio", explicaron fuentes cercanas a la empresa, una frase que resume el fin de la expansión de Diarco, que alguna vez llegó a tener 3.000 empleados. La competencia, la inflación y el contexto económico del país se convirtieron en factores determinantes para que esta cadena decidiera cerrar varias de sus puertas.

El cierre más reciente ocurrió en Balvanera, un barrio de Buenos Aires, donde el local cerró hace apenas unas semanas. Este movimiento forma parte de un ajuste generalizado que afecta a autoservicios mayoristas y minoristas por igual. Sin embargo, los trabajadores no ven un futuro claro, y las alarmas están encendidas en ciudades como Coronel Suárez, donde se teme que la sucursal también cierre.

Fuente: BAE