

Lanús volvió a escribir una página dorada de su historia al vencer 1-0 a la Universidad de Chile en el estadio Néstor Díaz Pérez y meterse nuevamente en la final de la Copa Sudamericana. El equipo de Mauricio Pellegrino jugó con madurez, aprovechó su momento y cerró una serie intensa, con pasajes de tensión y polémica. La Fortaleza fue una fiesta desde el primer minuto hasta el último silbato.


Durante la primera mitad, el encuentro fue parejo y con escasas situaciones de gol. A los 11 minutos, Marcelino Moreno había puesto en ventaja al “Granate”, pero su tanto fue anulado por posición adelantada tras una jugada precisa entre líneas. Lanús fue paciente, movió la pelota con criterio y esperó el error rival para generar peligro.
Con el correr del partido, el equipo local comenzó a adueñarse del mediocampo y a presionar con mayor intensidad. Rodrigo Castillo probó con un remate bajo que un defensor chileno alcanzó a desviar al córner, mientras la hinchada alentaba sin parar. El conjunto de Zielinski mostraba serenidad, consciente de que un gol podía definir la serie.
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En el complemento, el ritmo del partido se elevó notablemente. Una gran combinación entre Salvio, Carrera y Moreno casi termina en gol, pero Castellón respondió con una atajada espectacular. Pocos minutos después, el conjunto trasandino celebró un tanto de Salomoni que fue rápidamente anulado por offside.
El momento decisivo llegó a los 16 minutos, cuando Moreno desbordó con velocidad por izquierda y envió un centro preciso al corazón del área. Rodrigo Castillo controló con calidad, eludió al arquero y definió con clase para desatar la locura en La Fortaleza. La jugada previa incluyó una mano de Salvio que generó protesta de los chilenos, aunque el árbitro dejó seguir.
Con la ventaja, Lanús manejó los tiempos y no perdió la calma. La Universidad de Chile intentó reaccionar, pero se topó con una defensa sólida y un público que empujaba en cada pelota dividida. Javier Altamirano buscó sorprender desde lejos, aunque su disparo se fue apenas desviado.
Los minutos finales fueron de pura tensión y corazón. Walter Bou liberó a Méndez por derecha, quien intentó definir de primera pero su tiro se fue alto, ante la mirada de miles de hinchas que contenían la respiración. Cuando el árbitro marcó el final, el estadio explotó de alegría y emoción.
Lanús disputará su tercera final continental, tras haber levantado el trofeo en 2013 y rozar la gloria en 2020. Con una mezcla de juventud, experiencia y una hinchada incansable, el equipo del sur bonaerense vuelve a soñar con otro título internacional.
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Lanús: Nahuel Losada; Gonzalo Pérez, Carlos Izquierdoz, José Canale, Sasha Marcich; Agustín Medina, Agustín Cardozo; Eduardo Salvio, Marcelino Moreno, Ramiro Carrera; Rodrigo Castillo. DT: Mauricio Pellegrino.
Universidad de Chile: Gabriel Castellón; Fabián Hormazábal, Franco Calderón, Matías Zaldivia, Felipe Salomoni; Israel Poblete, Charles Aránguiz; Maximiliano Guerrero, Javier Altamirano, Lucas Di Yorio; Nicolás Guerra. DT: Gustavo Álvarez.
Gol en el segundo tiempo: 16m. Rodrigo Castillo (L).
Cambios en el segundo tiempo: 24m. Matías Sepúlveda por Felipe Salomoni (U), 31m. Leandro Fernández por Maximiliano Guerrero (U); 38m. Armando Méndez por Ramiro Carrera (L) y Franco Watson por Eduardo Salvio (L), 41m. Alexis Canelo por Marcelino Moreno (L) y Walter Bou por Rodrigo Castillo (L); 46m. Rodrigo Contreras por Franco Calderón (U); 48m. Ezequiel Muñoz por Agustín Medina (L).
Estadio: Ciudad de Lanús.
Árbitro: Alexis Herrera (Venezuela).
VAR: Ángel Arteaga (Venezuela).

















