Ruta deteriorada de Río Negro
La Fiscalía de Estado de Río Negro presentó un nuevo escrito ante la Justicia Federal para evitar que el recurso interpuesto por el Gobierno Nacional suspenda la ejecución de la sentencia que ordenó reparar la Ruta Nacional 151, una vía que atraviesa una de las zonas productivas más activas del norte provincial. El pedido busca impedir que la apelación frene las obras en un camino que, según el gobernador Alberto Weretilneck, “pone en riesgo vidas todos los días”.
El juez federal Hugo Greca había recorrido personalmente el tramo afectado y constató el “extremo deterioro” de la calzada. Luego, dictó un fallo que obliga a Vialidad Nacional a presentar un plan de acción en diez días e iniciar los trabajos en un máximo de noventa. Sin embargo, Nación apeló la medida y pidió que el recurso tenga efecto suspensivo, lo que en la práctica detendría cualquier avance hasta la resolución definitiva del caso.
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El fiscal adjunto Luciano Minetti Kern sostuvo que esa decisión “contradice la naturaleza urgente del amparo colectivo” y recordó que el deterioro de la traza afecta a más de 10.000 estudiantes, 2.300 docentes y 70 escuelas, además de sectores productivos vinculados con la fruticultura, la minería, el turismo y la industria hidrocarburífera. Por eso solicitó que la apelación se tramite con efecto devolutivo, lo que permitiría avanzar con las reparaciones mientras se resuelve la instancia judicial.
El origen del reclamo se remonta a mediados de año, cuando la provincia de Río Negro, junto a los municipios de Cipolletti, Catriel, Cinco Saltos, Contralmirante Cordero y Campo Grande, promovieron un amparo colectivo. El objetivo fue que la Justicia ordenara al Estado Nacional asumir la omisión de mantenimiento sobre los 150 kilómetros de la Ruta 151 comprendidos dentro del territorio provincial.
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Durante esa inspección, el juez Greca expresó que “una imagen vale más que mil palabras”, al observar los baches y deformaciones de la carpeta asfáltica. Su fallo reconoció la responsabilidad de Vialidad Nacional y ordenó que los trabajos se realicen en un plazo máximo de seis meses. No obstante, la apelación interpuesta por Nación reavivó el conflicto y reabrió la preocupación por los riesgos diarios para los usuarios.
El gobernador Weretilneck reaccionó duramente a la decisión del Gobierno Nacional. “En lugar de cumplir con la sentencia y asumir su responsabilidad, deciden estirar el proceso innecesariamente, mientras miles de personas siguen poniendo en riesgo su vida todos los días”, afirmó. Además, advirtió que el “centralismo porteño ignora la realidad del interior”, y que el abandono de la ruta afecta también a quienes se trasladan desde La Pampa.
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Desde la provincia sostienen que la falta de mantenimiento se arrastra hace años y que el deterioro de la traza ya generó numerosos siniestros viales. Weretilneck recordó que “no era un capricho, es un derecho” reclamar por una infraestructura segura y adecuada para los habitantes de la región.
La causa judicial sigue en trámite en el Tribunal de Alzada de General Roca, que deberá resolver si mantiene o revoca el efecto suspensivo del recurso. Mientras tanto, el gobierno rionegrino insiste en que la sentencia debe cumplirse sin demoras, ya que “cada día que pasa agrava la vulneración de derechos fundamentales”, tal como advirtió la Fiscalía de Estado.
Fuente: Diario La Arena
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