Brasil presiona a Trump para levantar los aranceles y busca un pacto comercial más amplio
Política13/11/2025
REDACCIÓN
Brasil EEUU
La reunión fue corta pero decisiva. En un pasillo del encuentro del G7 en Canadá, Mauro Vieira y Marco Rubio retomaron el diálogo sobre los aranceles que tensan la relación entre Brasil y Estados Unidos. Ambos acordaron reunirse nuevamente en las próximas semanas para intentar destrabar la negociación.
El encuentro se realizó en Niagara-on-the-Lake, al margen de la cumbre ministerial que reunió a las principales economías del mundo. Según informó la cancillería brasileña, Vieira y Rubio revisaron el estado de las conversaciones y evaluaron los pasos a seguir para reducir el impacto comercial.
“Abordamos la situación actual de las negociaciones bilaterales con Estados Unidos”, publicó el Ministerio brasileño en sus redes sociales, junto a una foto de los dos cancilleres dialogando. Fuentes oficiales señalaron que el objetivo de Brasil es lograr la suspensión inmediata del arancel del 50 % que Washington impuso sobre la mayoría de sus exportaciones.
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El canciller recordó que el 4 de noviembre Brasil presentó una propuesta formal al gobierno estadounidense tras una reunión virtual entre los equipos técnicos. Esa gestión responde, según Vieira, a una instrucción directa de Luiz Inácio Lula da Silva y Donald Trump, quienes hablaron del tema el mes pasado durante un encuentro en Malasia.
El conflicto comenzó en agosto, cuando la administración Trump impuso un arancel adicional del 50 % a las importaciones brasileñas. Lo hizo en represalia por la supuesta persecución judicial contra Jair Bolsonaro, su aliado político. Brasil considera esa medida “sin fundamento económico” y reclama que Estados Unidos mantiene un superávit comercial sostenido.
“Nuestra meta es eliminar las sobretasas y avanzar hacia un entendimiento más amplio, que incluya el comercio de tierras raras y minerales estratégicos”, explicaron desde el Itamaraty. Esa ampliación podría abrir la puerta a una agenda energética y tecnológica conjunta entre ambos países.
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Desde Washington ya surgieron señales de distensión. Trump mencionó la posibilidad de reducir algunos aranceles al café como parte de su estrategia para frenar la inflación interna. Sin embargo, el producto —uno de los principales de exportación brasileña junto con la carne— sigue alcanzado por las restricciones.
“Escuchamos la noticia sobre el café aquí en Canadá, pero no recibimos ninguna comunicación oficial. Sería una medida muy bienvenida”, declaró Vieira a la prensa en Ottawa. Para Brasil, un gesto en ese sentido marcaría el inicio de una normalización comercial que podría beneficiar a ambos mercados.
El trasfondo político sigue pesando. El diálogo se reactivó después de meses de sanciones cruzadas y visados revocados a jueces brasileños involucrados en la condena a Bolsonaro. Pero con Lula y Trump nuevamente en contacto, la diplomacia intenta dejar atrás el conflicto.
En Itamaraty confían en que la nueva ronda de conversaciones sirva para recomponer la relación bilateral y abrir un capítulo de cooperación más estable. Las próximas semanas serán decisivas para definir si la distensión se traduce en acuerdos concretos.
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