Cuatro ladrones ingresaron a la casa de Valeria Mazza y huyeron tras ser descubiertos por su hija

El hecho ocurrió el miércoles por la tarde en la casa de Valeria Mazza ubicada en Acassuso, partido de San Isidro. Según información obtenida por la agencia Noticias Argentinas, los delincuentes ingresaron luego de saltar el paredón perimetral, en un movimiento asociado a la modalidad denominada escruche, utilizada habitualmente cuando una vivienda queda temporalmente sin sus residentes. La modelo y parte de su familia se encuentran actualmente de viaje en Europa.

En el programa Arriba América (América TV) se consignó que uno de los delincuentes se presentó en la puerta y se hizo pasar por jardinero, con la intención de generar una distracción previa al ingreso. Mientras mantenía un breve diálogo con el cuidador de la casa, el resto del grupo avanzó hacia el interior de la propiedad. La maniobra quedó registrada en el relato periodístico que reconstruyó la secuencia delictiva.

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Dentro de la vivienda se encontraba una de las hijas de Mazza, acompañada por una amiga y dos empleadas. La periodista Verónica Rosales señaló: “La hija de Valeria Mazza empezó a los gritos. Tanto es así que esos gritos hicieron que los delincuentes se fuguen, desistan y depongan la actitud”, al describir el momento en que los intrusos fueron descubiertos. La reacción inmediata impidió que los ladrones avanzaran con el robo.

La misma periodista agregó que “así como entraron, se fueron, se llevaron una mochila negra… y la dejaron en la puerta de la casa”, lo que da cuenta de la rapidez con la que abandonaron el lugar al escuchar los gritos. Según indica el relato, la fuga incluyó la desestimación de los objetos que habían tomado para evitar demoras durante la salida.

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Desde el lugar del hecho, la movilera Florencia Ghio amplió el detalle del inicio del episodio. “Aparentemente, la persona que trabaja aquí como cuidadora de la casa, que se llama Darío Gabriel Rodríguez, atiende el timbre”, describió, para luego indicar que un joven ofreció servicios de jardinería. “Cuando cierra la puerta, se da cuenta de que por detrás de este terreno habían entrado cuatro delincuentes más”, añadió. En ese momento se escucharon los gritos provenientes del interior, que dieron por terminada la irrupción.

Fuente: NA.