A 19 años del crimen de Nora Dalmasso, crece la presión judicial sobre los fiscales del caso

A casi dos décadas del asesinato de Nora Dalmasso, el expediente volvió al centro de la escena por un giro institucional que expone la falta de avances desde 2006. Los fiscales Javier Di Santo, Daniel Miralles y Luis Pizarro presentaron sus descargos ante el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados de Córdoba, un paso que abre la posibilidad de un proceso disciplinario derivado del manejo de la investigación. La definición se conocerá en los próximos días y marcará un nuevo capítulo en una causa marcada por decisiones judiciales cuestionadas y líneas de trabajo que no lograron sostenerse en el tiempo.

La investigación se encuentra prescripta desde que se cumplió el plazo legal de quince años para sostener la pesquisa. El expediente no puede derivar en condenas, más allá de las responsabilidades penales que se discutieron durante años, lo que genera un profundo malestar en la familia de la víctima, que insiste en que existen elementos para continuar el proceso. La querella ya había advertido que el caso mantiene un “alto caudal probatorio” y que recurrirán a instancias superiores para intentar revertir la prescripción.

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Dentro de ese marco, volvió a cobrar relevancia la situación de Roberto Barzola, señalado en 2024 como sospechoso principal luego de que peritajes de ADN lo vincularan con rastros encontrados en la escena del crimen. Los estudios forenses determinaron que la víctima presentaba marcas de dedos en el cuello y signos de asfixia mediante compresión, además de lesiones compatibles con el uso del lazo de su bata. La hipótesis fue incorporada a la causa, aunque la prescripción dejó sin efecto cualquier posibilidad de juzgamiento.

En paralelo, la historia del expediente mantiene una serie de giros que incluyen la imputación de Marcelo Macarrón, esposo de Nora en el momento del crimen. El juicio por jurados celebrado en 2022 terminó con su absolución, decisión que dejó sin sostén la teoría de un homicidio por encargo y motivó nuevas críticas a la investigación. Ese fallo se sumó a años de cambios de fiscales, hipótesis descartadas y etapas sin avances concretos.

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La familia de la víctima reclama una revisión profunda del camino judicial recorrido y sostiene que la prescripción no debería impedir un análisis más amplio del expediente. Los allegados de Dalmasso buscan que Barzola sea llevado a juicio y que la responsabilidad institucional sea evaluada, tanto por las omisiones como por las decisiones adoptadas a lo largo de casi veinte años.

En ese contexto, el proceso administrativo que podría alcanzar a los tres fiscales aparece como una instancia que podría modificar el escenario institucional del caso. El Jurado de Enjuiciamiento deberá resolver si existen elementos suficientes para iniciar un proceso formal, una decisión esperada por los familiares, que mantienen su postura de continuar la pelea en el ámbito judicial y, si fuera necesario, ante organismos internacionales.

Fuente: NA.