
Esquel se prepara para el eclipse anular 2027 y apunta a recibir miles de turistas
Turismo27/11/2025
Sergio Bustos
Esquel comenzó a organizarse para uno de los eventos astronómicos más esperados de la década. El 7 de febrero de 2027, un eclipse solar anular tendrá su punto óptimo de observación en la región, posicionando a la ciudad como un destino de referencia internacional. La expectativa crece entre prestadores turísticos, científicos y aficionados que ya marcan la fecha en sus agendas.


Con ese horizonte, agencias de turismo y representantes municipales se reunieron para delinear acciones de promoción y logística. Del encuentro participaron la subsecretaria de Turismo, Florencia Andolfatti; el delegado regional del Ministerio de Turismo y Áreas Protegidas de Chubut, Alec Byrne; y referentes de Meraki Sur, Limits Adventure y Marcando Ruta.
Durante la jornada, Pablo Gerez, de Chubut Explorers, realizó una presentación técnica sobre el fenómeno y destacó a Esquel como “el mejor lugar del mundo para ver el eclipse”. Sumó además al Área Natural Protegida Piedra Parada, donde el “anillo de fuego” podrá apreciarse con máxima definición. El trazado de la sombra y las condiciones atmosféricas convierten a estos sitios en puntos privilegiados.
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El eclipse anular despierta interés global. Este tipo de eventos convoca a turistas especializados, investigadores, fotógrafos y viajeros ocasionales que buscan vivir una experiencia inédita. La coincidencia con el fin de semana largo de febrero multiplica las chances de atraer visitantes nacionales y extranjeros.
Según el cálculo presentado por Gerez, el fenómeno podría atraer hasta 30.000 turistas a Chubut, una cifra que obliga a planificar con anticipación. Las agencias destacaron la necesidad de trabajar en promoción internacional, disponibilidad de alojamientos, puntos estratégicos de observación y seguridad en rutas y senderos.
El municipio considera que esta oportunidad permitirá posicionar a Esquel como destino astronómico y fortalecer la oferta turística regional. Además, el eclipse podría generar un impacto económico significativo en hospedajes, gastronomía, transporte y excursiones.
Las autoridades coincidieron en que el desafío será coordinar esfuerzos para que la experiencia sea segura, ordenada y memorable. El trabajo conjunto entre sector público y privado será clave para recibir a miles de visitantes y mostrar la diversidad de paisajes que ofrece la zona cordillerana.
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Con la cuenta regresiva en marcha, Esquel comienza a prepararse para un evento único, de esos que se viven una vez en la vida y que pueden potenciar el turismo regional durante varios años.
















