

Ferro se consagró tricampeón del Torneo U-21 luego de una final contundente ante Racing, en una serie que mostró diferencias claras desde el inicio. El triunfo por 92-51 selló una campaña sólida y muy celebrada por el plantel, que mantuvo un rendimiento parejo durante toda la temporada. La institución destacó el trabajo del cuerpo técnico y la madurez de un grupo que creció con cada presentación.


La Maquinita ya había asegurado el primer punto de la serie con un 69-58 trabajado, lo que dejó bien encaminada la definición. Ese partido había mostrado paridad, pero marcó una tendencia que luego se profundizó con fuerza. La final terminó de exponer la distancia entre ambos equipos en un cierre contundente.
El logro alcanzado significó el tercer título consecutivo para Ferro en la categoría U-21, un logro que la institución valoró por la continuidad del proyecto deportivo y por la evolución del plantel juvenil. La racha consolidó una etapa muy positiva, en la que varios jugadores sumaron experiencia y responsabilidad. El club resaltó el crecimiento colectivo como uno de los pilares del éxito.

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La fase regular también había sido favorable para los dirigidos por Mario Sotosca, que terminaron en lo más alto con siete victorias y apenas una derrota. Ese traspié había sido ante Racing, lo que alimentó expectativas para la serie decisiva. Sin embargo, el rendimiento final mostró que Ferro logró ajustar detalles y potenciar su funcionamiento.
Las semifinales tuvieron momentos complejos, ya que Germinal sorprendió en el primer encuentro con un cierre ajustado que silenció el gimnasio. Ferro recuperó la iniciativa en Rawson y llevó la serie a un tercer partido que resolvió con autoridad. Esa recuperación reafirmó la fortaleza del equipo en momentos decisivos.
Racing llegó a la final tras superar a Deportivo Madryn, con una propuesta intensa y buenos pasajes de juego. El equipo intentó sostener esa línea ante Ferro, aunque no logró imponer seguridad en los momentos importantes. Las diferencias se hicieron más notorias a medida que avanzó la serie.
El primer cruce de la final había mostrado un partido parejo, con un cierre que se destrabó recién en los últimos minutos gracias a la presión defensiva de Ferro. La segunda presentación, en cambio, fue dominada desde el inicio por el conjunto patagónico. El resultado final terminó de sentenciar la historia.
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El equipo de Sotosca manejó los ritmos del segundo encuentro, impuso intensidad en ambos costados y generó ventajas rápidas que Racing no pudo revertir. El entrenador valoró la concentración y el compromiso del grupo.
La actuación colectiva fue uno de los puntos destacados en la final, con aportes repartidos y un juego dinámico que mantuvo controlado el trámite. Ferro mostró rotación amplia y ritmo constante, lo que fortaleció el funcionamiento general. La hinchada acompañó en gran número y celebró un nuevo logro.
La coronación agregó un nuevo capítulo a la historia reciente del club en formativas, con una camada que sigue creciendo y sumando protagonismo. El tricampeonato se festejó con entusiasmo y dejó un mensaje alentador para el futuro cercano. La dirigencia reconoció el esfuerzo y ya piensa en lo que viene para el básquet juvenil.

















