Strella alerta por la baja de vacunas: “se rompe el escudo” y sube el riesgo de brotes
Actualidad10/12/2025
Sergio Bustos
Teresa Strella.
La doctora Teresa Strella advirtió que la vacunación infantil cae fuerte en Argentina. El dato que inquieta: un 50% de chicos llega al ingreso escolar sin vacunación completa, muy lejos del 95% que se necesita para sostener la inmunidad colectiva y cortar la transmisión.
Strella es médica especialista en Infectología y Epidemiología. Además, conduce el Departamento de Medicina Interna del Hospital Zonal Puerto Madryn e integra ámbitos técnicos vinculados a la Sociedad Argentina de Infectología (SADI). Desde ese lugar, describió un escenario que ya no admite maquillaje: el retroceso de coberturas abre la puerta al regreso de enfermedades que el país había dejado atrás.
El sarampión aparece como la señal más sensible. Strella recordó que no hay circulación endémica desde el año 2000, un logro sanitario que se mantiene con vacunación alta, sostenida y pareja en todo el territorio.
Ese equilibrio se corta cuando faltan dosis en grupos grandes y durante varios años seguidos. Ahí, el “escudo” comunitario se debilita y cualquier ingreso del virus encuentra terreno fértil para generar cadenas de contagio.
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El contexto regional suma presión. La médica señaló que la Organización Panamericana de la Salud (OPS) informó la pérdida del estatus de región libre de sarampión en América, un aviso que empuja a reforzar defensas sin demoras.
La poliomielitis también vuelve a la conversación, aunque parezca un tema del pasado. Strella subrayó que el último caso registrado en el país se remonta a 1989, y advirtió que el peligro crece cuando la sociedad se acostumbra a no ver la enfermedad.
En esa línea, dejó una frase que golpea por su simpleza: “Hay unas cuantas generaciones… que no vimos personas con polio”. Para la especialista, ese desconocimiento del daño real alimenta descuidos y baja la urgencia social por vacunarse.
Aun con la alarma encendida, Strella remarcó un punto a favor: el calendario argentino mantiene fortaleza. Incluye alrededor de 20 vacunas, gratuitas y disponibles en el sistema público, con esquemas pensados para distintas edades y condiciones.
También destacó una incorporación reciente que apunta a proteger a los más chicos desde el minuto cero. Se trata de la vacuna contra el virus sincicial respiratorio (VSR) en personas gestantes, una medida que busca cubrir a los recién nacidos en los primeros meses, cuando el riesgo de cuadros graves sube.
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Para Strella, el problema no se resuelve sólo con oferta. Hace falta recuperar confianza y ordenar mensajes, porque la discusión pública hoy arrastra ruido, mitos y campañas de desinformación.
En ese punto, la especialista pidió repensar las estrategias de comunicación y definió a los comunicadores como “socios estratégicos” para frenar la “infodemia” que erosiona la vacunación obligatoria.
La salida también exige coordinación estatal. Strella planteó que Salud y Educación deben trabajar en conjunto para detectar esquemas incompletos en el ingreso escolar, acercar operativos a las familias y sostener campañas claras, sin vueltas.
El mensaje final apunta a una idea simple, pero potente: vacunarse no es un trámite individual. Es una decisión solidaria que protege a quienes no pueden recibir vacunas y evita brotes que impactan primero en los sectores más vulnerables.
Si la cobertura sigue en caída, Argentina arriesga logros históricos que parecían definitivos. Y cuando una enfermedad vuelve, no vuelve “suave”: vuelve con internaciones, secuelas y muertes evitables.
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