

Nacional y Peñarol activaron contactos informales con Boca por Brian Aguirre. Ambos clubes buscan reforzar las bandas para la próxima temporada. El interés surgió tras un cierre de año con menor participación del jugador.


El mercado de pases xeneize empieza a moverse entre altas y posibles salidas. Aguirre dejó de ser prioridad para el cuerpo técnico en las últimas semanas. Esa situación abrió la puerta a consultas externas desde Uruguay.
Desde Montevideo hubo llamados sin ofertas formales sobre la mesa. Los contactos apuntaron a conocer condiciones generales y predisposición. En Boca escuchan, aunque mantienen cautela por el contexto económico.
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La falta de minutos recientes alimenta versiones sobre una posible salida. Se evalúan escenarios de préstamo o transferencia definitiva. Igual, el valor del pase aparece como un límite concreto.
Boca pagó 4,6 millones de dólares a Newell’s por el extremo. La dirigencia no considera desprenderse por cifras menores. Esa inversión pesa en cualquier negociación futura.
Los números de Aguirre explican parte del panorama actual. Desde 2024 jugó 37 partidos oficiales con 1.840 minutos. Además, sumó cuatro goles y cuatro asistencias.
Durante un tramo tuvo continuidad, pero luego perdió terreno. El cierre del año mostró una presencia mucho más reducida. Las decisiones tácticas marcaron esa baja.
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El crecimiento de Exequiel Zeballos cambió el mapa ofensivo. Claudio Úbeda optó por otras variantes en encuentros determinantes. Aguirre quedó detrás en la consideración.
El escenario se complica con la llegada de Marino Hinestroza. El colombiano arribará para ocupar la misma posición. Esa competencia directa achica las oportunidades.
Por ahora, todo quedó en un simple sondeo telefónico. No hubo propuestas ni plazos definidos. El futuro de Aguirre sigue abierto y atado al mercado.


















