ESQUEL SE LLEVÓ EL PREMIO AL "MEJOR ALFAJOR DE LA PATAGONIA"

En el marco del Festival del Alfajor Patagónico de Lago Puelo, la plaza central de la ciudad se convirtió en el epicentro de una celebración cargada de sabor y tradición.

Miles de personas se congregaron para disfrutar de la segunda jornada de este evento municipal, que destacó por la presentación del alfajor más grande de la Patagonia Argentina.

El protagonista de la jornada fue un alfajor gigante elaborado con exquisitos ingredientes como chocolate, dulce de frambuesa, dulce de leche y mousse de chocolate, una verdadera experiencia sensorial para todos los presentes.

El momento cumbre llegó cuando el intendente municipal Iván Fernández realizó el primer corte al gigantesco dulce, que se ofreció de forma gratuita para el público, generando un clima de alegría y camaradería entre los asistentes.

Además del alfajor gigante, el evento destacó por la entrega de premios a los mejores alfajores participantes en diversas categorías.

Un jurado compuesto por reconocidas figuras de la gastronomía, como Any Cesar, Kalia Manzur y Juan Soria, realizó una rigurosa degustación a ciegas para seleccionar a los ganadores. Entre los premiados, se destacan "Ajo Negro" de Cipolletti como el mejor alfajor de rosa mosqueta, "Sabores Salvajes" de Lago Puelo como el mejor alfajor de murra, y "La Rada" de Rada Tilly, Chubut, como el mejor alfajor de autor.

El reconocimiento más esperado, el de "Mejor Alfajor de la Patagonia", fue para "Rosa de los Vientos", una familia de emprendedores de Esquel.

El emprendimiento artesanal y familiar "Rosa de los Vientos", liderado por Julieta Valsecchi e Ignacio Solari, se llevó el máximo galardón, reflejando así su compromiso con la calidad y la innovación en la producción de alfajores.

Con seis años en el mercado, este emprendimiento se ha convertido en un referente en la región, destacándose por su compromiso con la economía local y su constante búsqueda de nuevos sabores y aromas.

El éxito del Festival del Alfajor Patagónico de Lago Puelo refleja el crecimiento y la diversidad de la industria del dulce en Argentina, así como el valor de los emprendedores locales que trabajan día a día para llevar lo mejor de la gastronomía patagónica a todo el país.