


El Viking Júpiter decidió modificar su itinerario y pasar la noche del miércoles en Puerto Madryn. El capitán tomó esta decisión por el mal clima en Malvinas (su próximo destino). Esto activa la economía local y moviliza los servicios turísticos.
“El mal clima en Malvinas favorece a Madryn”, comentaron fuentes locales. El crucero permanecerá hasta el jueves, permitiendo a los turistas explorar más la ciudad y sus alrededores.
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La estancia prolongada implica ajustes en la logística de la ciudad. Los visitantes podrán disfrutar de opciones adicionales y experiencias nocturnas. Esto representa un impulso económico inesperado.
“Cada crucero es una inyección económica para la región”, afirmó un comerciante local. Restaurantes, agencias de turismo y tiendas esperan un aumento en sus ventas.
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La municipalidad trabaja junto a empresas para ofrecer una experiencia enriquecedora. Hoteles cercanos al puerto podrían recibir parte de la tripulación. Las visitas nocturnas se presentan como una atracción especial.
Las excursiones a Punta Tombo y Península Valdés se ven beneficiadas por el cambio. “Los turistas podrán recorrer la ciudad en horario especial”, destacó la dirección de turismo.
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Bares y restaurantes adaptan sus horarios para recibir al flujo adicional de visitantes. Locales comerciales ofrecerán productos típicos y recuerdos. La administración del puerto extiende permisos y asegura las operaciones de atraque.




