

LA SITUACIÓN DE LOS MENORES ACUSADOS POR EL CRIMEN DE KIM GÓMEZ
A un mes del crimen, el adolescente de 17 años sigue con prisión preventiva, mientras que el de 14 permanece en un instituto cerrado sin resolución firme.
Policiales

El crimen de Kim Gómez, que conmovió a todo el país, dejó a dos menores detenidos, cuya situación judicial continúa bajo análisis. Uno de ellos, de 17 años, permanece con prisión preventiva por 180 días como presunto autor del hecho. El otro, de 14, sigue alojado en un instituto cerrado sin un plazo definido.
La jueza María José Lescano dictó la medida que envió al mayor de los adolescentes a una unidad carcelaria, donde aguardará el juicio. La Fiscalía lo considera responsable directo del asesinato de la niña. El menor, en cambio, fue señalado como coautor y su situación aún no se resolvió por completo.
“Faltan informes técnicos que definirán el abordaje necesario para el joven de 14 años”, explicó la fiscal Carmen Ibarra. La jueza Lescano aguarda estos documentos antes de determinar el período de alojamiento en el instituto. La posibilidad de que el menor permanezca allí hasta los 18 años está sobre la mesa.
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La Unidad Fiscal N°3 de Menores de La Plata sostiene que debe garantizarse la seguridad del adolescente y el cumplimiento de una medida socioeducativa. El organismo de Niñez trabaja sobre el perfil del joven para establecer su tratamiento institucional. Mientras tanto, la situación judicial del menor sigue en suspenso.
La defensa intentó apelar la medida de seguridad dictada contra el adolescente más chico. La Sala 1 de la Cámara de Apelaciones en lo Penal de La Plata rechazó el recurso. La decisión reafirma la necesidad de mantener al menor privado de su libertad mientras se define su destino procesal.
La fiscal señaló que el joven “está bien” dentro del instituto cerrado y que no hubo incidentes desde su ingreso. El equipo técnico del lugar monitorea su conducta de forma permanente. El informe final será clave para definir el curso judicial.
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Ambos adolescentes fueron arrestados poco después del asesinato de Kim Gómez. La investigación los ubicó en la escena del crimen y determinó su participación activa. El caso generó un fuerte impacto público por la corta edad de los implicados y el brutal asesinato de la niña.



