


El presidente Javier Milei recibió este lunes en Casa Rosada al secretario del Tesoro de los Estados Unidos, Scott Bessent, quien llegó a la Argentina para manifestar el respaldo formal del gobierno norteamericano al rumbo económico adoptado por el país. Durante el encuentro, ambas partes analizaron el reciente acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y celebraron la salida del cepo cambiario como un paso relevante para el comercio bilateral.
Bessent asistió a la reunión junto a la encargada de negocios de la Embajada, Lydia Barraza; el subsecretario adjunto para Asuntos del Hemisferio Occidental, Michael Kaplan; y el jefe de gabinete del Tesoro, Dan Katz. En representación del Gobierno argentino participaron el ministro de Economía, Luis Caputo, el presidente del Banco Central, Santiago Bausili, el secretario de Finanzas, Pablo Quirno, y el secretario de Políticas Económicas, José Luis Daza.
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El funcionario norteamericano transmitió el "pleno apoyo de Estados Unidos a las audaces reformas económicas del Presidente", y destacó la “pronta acción de la Argentina para reducir las barreras al comercio recíproco”. También elogió el rol del equipo económico argentino y la estrategia para estabilizar la macroeconomía.
En el comunicado oficial, el Tesoro de EE.UU. valoró las recientes negociaciones con el FMI por un nuevo financiamiento de 20 mil millones de dólares, y sostuvo que el país "puede lograr un futuro prometedor con políticas económicas que garanticen estabilidad y crecimiento para los trabajadores y el sector privado".
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Bessent mantuvo además una reunión más temprano con Caputo en el Palacio de Hacienda, donde volvió a resaltar su liderazgo en la implementación del plan económico. No obstante, desestimó la posibilidad de una línea de crédito directa por parte de EE.UU., al aclarar desde Buenos Aires que “eso no está bajo consideración”.
Desde el entorno presidencial destacaron el encuentro como una señal clave de confianza externa. Según fuentes oficiales, el respaldo estadounidense refuerza la estrategia del Gobierno de consolidar su programa económico a través de acuerdos multilaterales y vínculos bilaterales sólidos, en especial con los principales actores financieros globales.







