


Los divorcios en Río Negro disminuyeron de manera significativa en 2024. El año pasado se iniciaron 1.240 causas de disolución matrimonial. En 2023, se habían dictado 1.529 sentencias de divorcio. Ese número representó un récord histórico en la provincia. La baja fue de casi 300 procesos de un año a otro. El descenso marca un cambio en la tendencia reciente.
En 2022 se habían registrado 1.204 divorcios. En 2021, el total alcanzó 1.333 casos. En 2020, durante la pandemia, se firmaron solo 910 divorcios. Las restricciones impactaron en la actividad judicial. Los años anteriores mostraron cifras relativamente estables. El promedio rondaba entre 1.300 y 1.400 procesos anuales. En 2019 hubo 1.386 divorcios. En 2018, 1.426 sentencias.
Los registros anteriores mostraban pequeñas variaciones. En 2017 se firmaron 1.395 divorcios. En 2016, el total fue de 1.400 casos. En 2015 y 2014 las cifras fueron 903 y 1.078 respectivamente. Se notó un crecimiento progresivo hasta el pico de 2023. Los trámites se concentran en 16 organismos distribuidos en la provincia. Viedma cuenta con tres unidades procesales de familia. San Antonio Oeste posee un juzgado Multifueros.
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En General Roca funcionan otras tres unidades procesales. Villa Regina, Luis Beltrán, Bariloche, El Bolsón y Cipolletti también tienen organismos especializados. La disolución del matrimonio está regulada por el artículo 435 del Código Civil y Comercial. El divorcio puede solicitarse en forma unilateral o conjunta. El pedido debe ser declarado judicialmente para tener validez legal.
El Centro de Planificación Estratégica del STJ relevó los datos. El análisis permite conocer la evolución anual de los procesos. La baja registrada en 2024 resulta llamativa tras el récord anterior. Especialistas analizan factores sociales y económicos para explicar la disminución. Cambios en la dinámica familiar podrían influir.
Algunos señalan que la crisis económica podría haber postergado decisiones de separación. Otros consideran que los procesos de mediación familiar también impactan. Las alternativas al litigio judicial crecen. El divorcio sigue siendo un recurso legal disponible para todas las parejas casadas.
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La judicialización busca resolver cuestiones patrimoniales y de responsabilidad parental. Cada caso presenta particularidades. La disminución de divorcios podría consolidarse como tendencia si continúa en 2025. La información estadística permite planificar políticas públicas y judiciales. El acceso a datos actualizados resulta fundamental.
Río Negro mantiene un sistema judicial especializado para atender los procesos de familia. La celeridad en las tramitaciones es una meta permanente de los organismos. La modernización del sistema contribuye a ello. La baja de divorcios representa un dato relevante para la sociedad rionegrina.







