


La reaparición del sarampión encendió una señal de alarma sanitaria en Capital Federal y la provincia de Buenos Aires. El Boletín Epidemiológico Nacional confirmó 26 casos en el país, de los cuales 25 corresponden al Área Metropolitana. Las autoridades monitorean con atención la concentración de contagios.


En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires ya se detectaron 11 pacientes con diagnóstico confirmado. La mayoría de los contagios se concentran en la Comuna 14, zona de Palermo, donde se identificó el primer caso. El brote inicial se originó entre personas convivientes y contactos laborales.
En la provincia de Buenos Aires se sumó un nuevo caso en la última semana, totalizando 14 contagios confirmados. Ocho de ellos presentan un vínculo epidemiológico identificado, lo que facilita el seguimiento de la cadena de transmisión. El resto sigue bajo análisis clínico y epidemiológico.
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Fuera del Área Metropolitana solo se registró un caso, en la provincia de San Luis. Se trata de una beba de ocho meses que no estaba vacunada debido a su edad y que había viajado recientemente a Chihuahua, México. Este caso importado no tiene nexo con los contagios locales.
El sarampión es una enfermedad viral extremadamente contagiosa que puede afectar a personas de todas las edades. Las complicaciones pueden incluir neumonía, encefalitis, convulsiones, ceguera e incluso la muerte. No existe tratamiento antiviral específico y solo puede prevenirse mediante vacunación.
El virus se transmite por el aire a través de gotas expulsadas por la nariz, boca o garganta de personas infectadas. Puede permanecer activo durante dos horas en superficies y en ambientes cerrados. Esa capacidad de persistencia lo convierte en un agente de alto riesgo en espacios compartidos.
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El Ministerio de Salud recordó la importancia de completar el esquema de vacunación contra el sarampión. Las dosis están incluidas en el calendario nacional y se aplican a partir del año de vida. Las campañas de inmunización buscan evitar nuevos brotes en zonas urbanas densamente pobladas.
Los síntomas iniciales incluyen fiebre alta, secreción nasal, tos, manchas blancas en la boca y sarpullido generalizado. La enfermedad suele presentarse con mayor intensidad en niños pequeños y personas inmunocomprometidas. Cualquier síntoma compatible debe ser motivo de consulta médica inmediata.
La Comuna 14 en CABA permanece bajo vigilancia sanitaria permanente. Se reforzó la búsqueda activa de casos y se intensificó la campaña de vacunación casa por casa. Los equipos de salud trabajan para interrumpir la cadena de contagios.
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En el conurbano bonaerense también se implementaron operativos focalizados en barrios con baja cobertura de vacunas. Los municipios coordinan acciones con la provincia y la Nación para reducir el riesgo de propagación. El foco principal se mantiene en la zona norte del Gran Buenos Aires.
Expertos en infectología advierten que la baja percepción del riesgo puede complicar la contención del brote. La eliminación del sarampión como enfermedad endémica en Argentina se logró en 2000, pero los brotes siguen siendo posibles. La vigilancia epidemiológica debe mantenerse activa.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) alertó sobre el aumento global de casos en los últimos años. Factores como los movimientos antivacunas y las coberturas incompletas son señalados como detonantes. El sarampión es considerado uno de los virus más contagiosos conocidos.
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Los profesionales de la salud recomiendan evitar la exposición en lugares cerrados si hay síntomas compatibles. También sugieren que los adultos verifiquen su esquema completo de vacunación. La prevención es la única herramienta efectiva ante un virus sin tratamiento específico.
Las autoridades sanitarias continúan emitiendo alertas a los efectores de salud públicos y privados. Se solicita notificar en forma inmediata cualquier caso sospechoso de fiebre con exantema. El diagnóstico precoz y el aislamiento son fundamentales para contener nuevos brotes.
La población debe mantenerse informada por vías oficiales y no minimizar los síntomas. El acceso gratuito a la vacuna permite prevenir una enfermedad que puede tener consecuencias graves. La coordinación entre Nación, provincias y municipios es esencial para frenar el avance.
Fuente: NA.







