


El titular de Tránsito de Puerto Madryn, Néstor Siri, confirmó la continuidad de las pruebas piloto de ciclovías. Aseguró que el modelo aplicado recibió respaldo técnico y operativo por parte del municipio. “Vamos caminando”, resumió en diálogo con #LA17 luego de su exposición ante el Concejo Deliberante.
Siri afirmó que la bicicleta está instalada como medio de movilidad y trabajo en la ciudad. Explicó que muchas personas la usan diariamente por necesidad, y no como una elección recreativa. “No todos tienen acceso a una moto o a un vehículo”, indicó.
Durante la reunión con concejales, se analizaron criterios de ingeniería vial y observaciones de campo. Participaron técnicos municipales y personal de la vía pública con experiencia directa. El objetivo fue ajustar el diseño a las realidades cotidianas.
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“Hay que respetar a ese grupo de gente que se mueve como único medio en bicicleta”, remarcó. Siri señaló que la ciclovía ordenará un tránsito hoy anárquico y sin normas claras. “Cada uno decide por dónde ir y crea sus propias leyes”, agregó.
La infraestructura en marcha busca otorgar previsibilidad y mayor seguridad para quienes se trasladan en bicicleta. El carril asignado permitirá que puedan circular de ida y vuelta sin riesgos innecesarios. El modelo de ciclovía se diferencia de la bicisenda por su carácter funcional y no recreativo.
Las pruebas piloto ya implementadas funcionaron de manera positiva, según el balance oficial. El municipio anunciará en breve las próximas calles donde se replicará el sistema. “Vamos a ir por más calles”, confirmó Siri.
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La red que se proyecta apunta a conectar sectores clave de la ciudad con trazados continuos y seguros. La movilidad sustentable será una prioridad en la planificación urbana de los próximos meses. El enfoque combina criterios técnicos con necesidades sociales reales.
Siri también explicó una intervención vial reciente en la zona del supermercado Changomás. La obra incluye nuevas salidas sobre las calles Jujuy y Dorrego, pensadas para descomprimir la zona. “Eso daría mayor agilidad y no tanto conflicto como nos generan hoy los vehículos”, afirmó.
La iniciativa responde a un reclamo histórico de vecinos, trabajadores y comerciantes. El municipio eliminó el uso de la calle Juan B. Justo para vehículos de gran porte. “La calle era restrictiva y teníamos dificultad operativa”, recordó el funcionario.
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El nuevo diseño propone dividir los accesos para clientes y camiones, disminuyendo la tensión vehicular. Así se evitarán embotellamientos en un área comercial con alta circulación diaria. La intervención fue planificada por el área de ingeniería civil.
El arquitecto Tommaso Grioni lidera el equipo que elaboró el proyecto y definió las nuevas salidas operativas. Siri valoró el trabajo conjunto entre áreas técnicas y de tránsito. “Estamos apuntando a que el negocio tenga dos salidas nuevas”, señaló.
El municipio busca ordenar el tránsito comercial sin afectar la actividad económica de la zona. Cada obra vial apunta a resolver problemas puntuales con soluciones sostenibles en el tiempo. El caso Changomás es uno de varios que se están abordando en paralelo.







