


Una fuerte nevada obligó a restringir la circulación vehicular en un tramo clave de la Ruta Nacional 40, entre las localidades de La Esperanza y El Calafate, en la provincia de Santa Cruz. La medida, tomada por la Agencia Provincial de Seguridad Vial, apunta a evitar accidentes en una zona donde la visibilidad se redujo drásticamente.


El operativo se llevó a cabo de manera conjunta entre Vialidad Provincial, Protección Civil y efectivos de la Policía de Santa Cruz. Las autoridades confirmaron que la región se encuentra bajo una alerta meteorológica activa. Se trata de una medida preventiva para preservar la seguridad de quienes circulan por una de las rutas más transitadas del sur argentino.
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La Ruta Nacional 40 atraviesa zonas de clima extremo, donde las condiciones pueden modificarse de forma abrupta. Por eso, durante el otoño y el invierno, los cortes o restricciones temporarias son habituales. En este caso, la decisión se tomó tras constatar una caída repentina de nieve con acumulación sobre la calzada.
El tramo afectado es considerado de vital importancia para la conectividad entre localidades santacruceñas. Es también un corredor turístico clave, que conecta a El Calafate con distintos puntos de la Patagonia. Por eso, el corte genera impacto tanto en el tránsito local como en el movimiento de visitantes.
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Desde el gobierno provincial se emitieron recomendaciones específicas para quienes deban circular por la zona una vez que se habilite el tránsito nuevamente. Se insiste en respetar las indicaciones del personal en el lugar y evitar desplazamientos innecesarios mientras se mantenga la alerta. También se aconseja verificar el estado de las rutas y acondicionar los vehículos con cadenas y elementos para nieve.
La medida se adoptó en coordinación con organismos meteorológicos que vienen anticipando un frente frío de gran intensidad. Las nevadas, que comenzaron durante la madrugada del domingo, fueron ganando fuerza con el correr de las horas. El fenómeno sorprendió por su intensidad y persistencia.
Las autoridades adelantaron que se realizará una nueva evaluación de la situación una vez que concluya el plazo inicial de la restricción. Si las condiciones no mejoran, la circulación podría seguir limitada. El objetivo es actuar con prudencia y evitar siniestros viales en una zona de alto riesgo.
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En años anteriores, eventos similares provocaron accidentes y complicaciones logísticas en rutas del sur del país. Esta vez, se decidió actuar con anticipación para evitar escenarios indeseables. El antecedente de inviernos duros en Santa Cruz pesa en cada decisión que se toma frente a estos fenómenos.
El alerta meteorológica vigente no solo afecta a la Ruta 40, sino también a caminos secundarios de la región. Se recomienda a quienes planeaban viajar en las próximas horas que consulten fuentes oficiales antes de emprender cualquier trayecto. Las condiciones pueden cambiar con rapidez.
Fuente: La Opinión Austral









