


Héctor Daer, uno de los dirigentes más influyentes del gremialismo nacional, no se presentó para renovar su mandato al frente de la Asociación de Trabajadores de la Sanidad Argentina (ATSA) Filial Buenos Aires, gremio que condujo desde 2001. Tampoco continuará como cosecretario de la Confederación General del Trabajo (CGT), tal como ya había adelantado semanas atrás.


En un emotivo acto de la lista Celeste y Blanca, Daer expresó: “Me voy feliz sabiendo que la Celeste y Blanca sigue fuerte y cuidando a nuestra organización”. Si bien da un paso al costado de la Secretaría General, aseguró que no se retira de la militancia, sino que continuará su compromiso desde otros espacios.
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Las elecciones en ATSA Buenos Aires se realizarán el 7 de agosto y las nuevas autoridades asumirán el 3 de noviembre. En el cierre de listas, Daer no figura en ningún cargo, ni siquiera como vocal, y propuso a Javier Pokoik, actual secretario gremial, como su sucesor, con Norberto Maschio como adjunto.
Durante su discurso, Daer enfatizó que la conducción sindical “no se construyó pensando en un mandato personal, sino en una organización que trascienda y crezca”. Aseguró que confía en los nuevos liderazgos de la agrupación y que la lista Celeste y Blanca continuará representando a los trabajadores del sector salud.
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La interna gremial no será un trámite: habrá competencia en las elecciones, aunque Daer insistió en que su lista tiene la legitimidad de la trayectoria. “La lucha no termina en una elección, la lucha es todos los días”, sentenció. Y agregó que la militancia debe seguir siendo “sin oportunismos, con solidaridad y la identidad Celeste y Blanca”.
Daer inició su carrera sindical como delegado de los trabajadores de Laboratorios Bernabó en 1985. En 1993 fue electo secretario gremial de ATSA Buenos Aires, cargo que ocupó hasta 2001, cuando ganó por primera vez la Secretaría General. En 2021, logró su reelección con más del 90% de los votos.
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Además de su papel en ATSA, desde 2022 Daer preside la Federación de Asociaciones de Trabajadores de la Sanidad Argentina (FATSA), tras la salida del histórico Carlos West Ocampo. También lidera la rama americana de UNI Global Union desde 2018. Esos cargos seguirán en pie.
En abril, ya había adelantado que tampoco buscaría renovar su mandato en la CGT. Su visión para el futuro de la central obrera incluye una conducción unipersonal, con una forma de comunicación más moderna. Si bien no descartó seguir ligado a la CGT, señaló que no será desde un rol de liderazgo.




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