

La ciudad de Trelew avanza con una de sus obras urbanas más significativas: la remodelación integral de la terminal de ómnibus, un edificio por el que circulan más de 160 micros diarios y que constituye un punto neurálgico del transporte regional. Esta segunda etapa, actualmente en ejecución, demandará una inversión superior a los $480 millones y será financiada íntegramente con recursos municipales, una decisión que refuerza la autonomía y planificación local en materia de infraestructura pública.


Los trabajos actuales se concentran en la mejora de los accesos laterales, la renovación de pintura exterior, la modernización de la iluminación y la incorporación de nuevo mobiliario urbano, sumando también intervenciones fundamentales en los sanitarios de planta baja, cielorrasos y sectores clave del interior del edificio. Todas estas tareas se desarrollan sin interrumpir el funcionamiento de la terminal, que opera durante todo el año con alto nivel de circulación tanto de micros como de usuarios.
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Esta transformación se inscribe en un plan integral de mejoramiento urbano, impulsado por el Municipio con el objetivo de poner en valor espacios públicos esenciales, optimizar la experiencia de viaje y brindar mejores condiciones tanto a pasajeros como a trabajadores del transporte. La terminal, como punto de llegada y partida para miles de personas, constituye una puerta de entrada que define la imagen y funcionamiento de la ciudad.
En una etapa anterior, ya fue habilitado el nuevo acceso a la plataforma de micros, una obra que demandó 48 millones de pesos y que marcó el inicio visible del proceso de renovación, esperado desde hace años por vecinos y trabajadores del sector. Esa intervención permitió ordenar los flujos de pasajeros, mejorar la seguridad operativa y optimizar el embarque y desembarque de unidades.
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La decisión de afrontar la obra con fondos propios representa una señal clara de compromiso con la gestión responsable y el fortalecimiento de la infraestructura urbana, sin depender de financiamiento externo. Esto permite mayor flexibilidad en la ejecución y una respuesta directa a las necesidades que la comunidad manifiesta en relación al uso cotidiano del edificio.
La remodelación también tiene como horizonte una terminal más accesible, segura y funcional, que esté a la altura de la demanda actual y que contemple el crecimiento futuro del sistema de transporte interurbano. La ciudad apuesta así a consolidarse como un centro regional, cuidando sus espacios y jerarquizando la calidad de los servicios ofrecidos.

















