Plantas pesqueras de Chubut acordaron con STIA y garantizan estabilidad hasta mayo de 2026
Chubut29/07/2025
Sergio Bustos
Pesca en Chubut.
La industria pesquera de Chubut atraviesa un momento delicado. Mientras los buques congeladores tangoneros siguen detenidos por el conflicto con el SOMU, las plantas procesadoras lograron un entendimiento salarial con el STIA que trae alivio a una parte del sector.
El acuerdo, firmado el viernes, extiende la vigencia de la pauta salarial hasta el 31 de mayo de 2026. Las condiciones mantienen el esquema de montos no remunerativos y ratifican el compromiso por garantizar la continuidad laboral.
Los trabajadores jornalizados percibirán $90.000 quincenales no remunerativos, mientras que los mensualizados recibirán $200.000 bajo la misma modalidad. Estos montos se integrarán al básico en marzo del año próximo.
Además, el convenio incluye un bono anual de fidelidad y paz social de $390.000, dividido en dos pagos: uno en diciembre de 2025 y otro en marzo de 2026. El beneficio ya se había aplicado en ciclos anteriores.
El texto firmado subraya que “las partes coincidieron en priorizar la labor efectiva y productiva, con nuevas condiciones de prestación que estimulen el compromiso responsable”.
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El acuerdo también reconoce la gravedad del contexto actual. “La situación de la actividad pesquera fabril es extremadamente dificultosa”, señalaron, en alusión a la caída de precios internacionales, la sobreoferta de langostino y la pérdida de competitividad.
La Cámara Argentina Patagónica de Industrias Pesqueras celebró el entendimiento. Según voceros del sector, el objetivo fue preservar la paz social sin desconocer el impacto que atraviesa toda la cadena.
A diferencia de lo que ocurre en el frente marítimo, la negociación entre STIA y las plantas se desarrolló sin ruidos. No hubo bloqueos, ni asambleas permanentes, ni intervención estatal.
“Queríamos dejar claro que aún con dificultades se puede acordar con madurez,” señalaron desde el sindicato. La referencia apunta al conflicto con el SOMU, que paraliza casi por completo la operatoria de la flota congeladora.
Actualmente hay 111 buques tangoneros en puerto. Solo tres lograron salir al mar en medio de una temporada que, según fuentes del sector, ya se da por perdida.
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La paritaria cerrada con STIA genera previsibilidad para los obreros de planta, que temían una ola de despidos. Con el acuerdo firmado, se garantiza la continuidad laboral durante los próximos diez meses.
Los incrementos no remunerativos buscan evitar mayores cargas para las empresas, que operan con márgenes reducidos. La fórmula se utiliza hace años y fue consensuada entre las partes.
En el sector reconocen que no es una solución definitiva, pero sí una contención eficaz. “Lo importante es sostener el empleo y que la industria no se caiga”, resumió un empresario de Puerto Madryn.
El acuerdo se formalizó sin presencia del Ministerio de Trabajo ni de autoridades provinciales. Fue un entendimiento directo, de mesa chica, entre quienes conocen los pasillos de las plantas y los vaivenes de la pesca.
La expectativa ahora está puesta en la reactivación del puerto. Con las plantas activas, el eslabón en tierra muestra signos de orden. Pero si no se resuelve el conflicto marítimo, el impacto será inevitable.
El acuerdo STIA-Cámara marca una diferencia en tiempos de incertidumbre. En una industria donde todo parece paralizado, al menos un engranaje logró seguir en movimiento.
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