El Gobierno elimina dos secretarías y concentra el manejo productivo en el Ministerio de Economía

El Gobierno nacional, encabezado por Javier Milei, decidió cerrar la Secretaría de Industria y Comercio y la Secretaría PyME, en una reestructuración que concentra todas sus funciones en el Ministerio de Economía. El cambio fue oficializado este miércoles mediante un comunicado del Palacio de Hacienda.

A partir de ahora, ambas estructuras pasarán a formar parte de la Secretaría de Coordinación de Producción, a cargo de Pablo Lavigne, quien dependerá directamente del ministro de Economía, Luis Caputo. El objetivo declarado es “optimizar la estructura y volver más eficiente su funcionamiento”, sin que se produzcan interrupciones en los programas vigentes.

El 14 de agosto será el último día en funciones de Esteban Marzorati y Marcos Ayerra, titulares salientes de las secretarías disueltas. Desde el Gobierno aseguraron que ambos se alejan por “motivos personales y nuevos desafíos profesionales”, aunque su salida ocurre en medio de un fuerte ajuste administrativo.

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El comunicado oficial remarcó que las Subsecretarías de ambas áreas seguirán en funciones y reportarán al nuevo secretario coordinador, en un esquema que mantiene los equipos técnicos pero centraliza la toma de decisiones. No se informó aún si habrá despidos o reasignaciones internas.

“Los equipos de las Secretarías continuarán trabajando y los programas seguirán vigentes”, afirmó el parte del Ministerio de Economía, en un intento por llevar tranquilidad a cámaras empresarias, emprendedores y sectores productivos.

La Secretaría PyME era hasta ahora el principal canal de apoyo para pequeñas y medianas empresas, así como para emprendedores y sectores vinculados a la economía del conocimiento. Su desaparición como estructura autónoma genera preocupación en entidades que reclaman políticas diferenciadas para este universo productivo.

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En el caso de la Secretaría de Industria y Comercio, sus competencias incluían las políticas fabriles, el comercio interno y exterior, y las estrategias de integración regional. Su cierre implica un rediseño completo del mapa institucional en el área productiva.

La decisión se inscribe en la estrategia de Milei de reducir la estructura estatal y delegar mayor poder en áreas centralizadas del Ejecutivo. Desde su asunción, el presidente ha promovido una fuerte reducción de ministerios, direcciones y programas, con el argumento de mejorar la eficiencia y reducir el gasto público.

Esta nueva etapa pone a Pablo Lavigne al frente de una estructura más amplia y estratégica, que deberá absorber la gestión de sectores productivos clave en un momento de fuerte desaceleración económica y caída de la actividad industrial.

Fuente: N A