

Tres jóvenes patinadoras de Chubut viajaron a Brasil como parte del seleccionado argentino de patín artístico y participaron en un torneo internacional que reunió a las mejores exponentes de Sudamérica. Se trata de Avril Etchaide y Catalina Cruz, de Puerto Madryn, e Isabella Chávez, de Comodoro Rivadavia, quienes compitieron en los IV Juegos Sudamericanos de Deportes sobre Ruedas 2025, realizados entre el 4 y el 10 de agosto en Venâncio Aires, estado de Río Grande do Sul.


Etchaide y Cruz, de 16 años, representan al Club Deportivo Madryn, mientras que Chávez, de 11 años, pertenece a la escuela “Sueños sobre Ruedas” de su ciudad natal. Cada una participó en diferentes modalidades dentro de la disciplina del patín artístico, representando no solo a la Argentina, sino también a la provincia. Para todas fue su primera experiencia internacional de esta magnitud.
OTRAS NOTICIAS:
El certamen contó con la presencia de delegaciones de toda Sudamérica. El nivel técnico fue exigente y dejó actuaciones de altísima calidad. Las chubutenses no lograron subir al podio, pero cumplieron con una participación sólida y valiosa.
El torneo no solo sirvió como competencia, sino también como una instancia de aprendizaje y crecimiento. Las jóvenes compartieron jornadas con patinadoras de gran trayectoria y nivel.
Las familias y entrenadores acompañaron a las chicas en este recorrido deportivo. En sus clubes ya las esperan con orgullo para seguir apoyando su camino en este deporte. Las tres patinadoras regresaron con la motivación de seguir entrenando y creciendo.
OTRAS NOTICIAS:
Desde la Federación de Patín destacaron la participación argentina. Resaltaron el compromiso y la entrega de las deportistas más jóvenes del plantel. Chubut volvió a decir presente en un evento internacional de gran importancia.
La experiencia en Brasil fue mucho más que una competencia: fue una muestra de esfuerzo, pasión y sueños en movimiento. Las patinadoras dejaron su huella y demostraron que el trabajo diario da sus frutos, más allá del resultado. La provincia las recibe con los brazos abiertos.

















