
El suicidio es la primera causa de muerte entre adolescentes mujeres en Argentina
Actualidad21/09/2025
REDACCIÓN
El Observatorio del Desarrollo Humano y la Vulnerabilidad de la Universidad Austral difundió un estudio que expone un giro alarmante en la salud pública juvenil. En 2023, el suicidio fue la primera causa de muerte entre adolescentes mujeres de 10 a 19 años, superando por primera vez a tumores y accidentes. Los datos marcan un quiebre epidemiológico que obliga a repensar las políticas de prevención con perspectiva de género.
Las cifras son contundentes. En ese grupo etario se registraron 148 muertes por suicidio, frente a 119 por tumores y 103 por accidentes. La investigación también señala que los casos de jóvenes de entre 20 y 29 años alcanzaron un récord histórico con 1.030 muertes, el número más alto desde 2017. Según el informe, esto revela “una crisis emocional profunda en una franja etaria clave para la vida personal, profesional y social”.
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El informe, dirigido por las investigadoras Rocío González y Victoria Bein, advierte que “estos datos, lejos de ser aislados, se inscriben en un contexto de creciente malestar emocional, falta de contención y escasa formación en habilidades socioemocionales”. En adolescentes de 10 a 19 años, se contabilizaron 386 suicidios durante 2023, una cifra que permanece en niveles críticos sin mostrar mejoras respecto a años previos.
El trabajo remarca la multiplicidad de factores en juego. “El suicidio es un fenómeno multicausal, influido por una compleja interacción de factores biológicos, psicológicos, sociales y culturales”, explica Bein. La especialista citó a la Organización Mundial de la Salud y a UNICEF, que enumeran como riesgos la ausencia de redes de apoyo afectivo, la presión académica y laboral en las transiciones evolutivas, la rigidez normativa y la falta de diagnóstico y tratamiento de trastornos como depresión y ansiedad.
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El estudio también vincula el incremento en adolescentes mujeres con las consecuencias de la pandemia. “El cierre de escuelas significó la pérdida de un entorno protector y de la posibilidad de detección temprana de malestar emocional por parte de docentes y equipos de orientación”, sostiene el informe. A esto se sumaron el aislamiento social, la ruptura de rutinas y la mayor exposición a violencia intrafamiliar, factores que intensificaron la sensación de soledad y sobrecarga emocional.
Las investigadoras subrayan que durante el confinamiento aumentó el tiempo de uso de redes sociales, lo que derivó en “mayor comparación social, exposición a estándares de belleza poco realistas y riesgo de ciberacoso”, con un impacto más fuerte en la autoestima femenina. Este escenario, sumado a la dificultad de retomar proyectos de vida tras la reapertura, habría acelerado el paso de malestar emocional a conductas de riesgo.
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La perspectiva de género aparece como central para entender los cambios recientes. “Por primera vez el suicidio supera a tumores y accidentes como causa principal de muerte en mujeres adolescentes”, advierte Bein, quien además resalta que los varones jóvenes también muestran un aumento sostenido en los casos, triplicando a las mujeres en números absolutos. El rango de 20 a 29 años se describe como un período de transición marcado por frustraciones y sobrecarga emocional.
Entre las diferencias de género, el informe indica que los varones tienden a sobrevalorar sus habilidades emocionales y a usar estrategias evitativas como la negación o el consumo problemático, mientras que las mujeres suelen subvalorar sus capacidades y pedir menos ayuda. “Esta brecha favorece que ellos subestimen su malestar y que ellas se sientan incapaces de buscar asistencia”, advierten las autoras.
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La conclusión del trabajo es categórica. “Estos hallazgos refuerzan la necesidad de implementar programas de prevención en universidades y entornos laborales, campañas de sensibilización que reduzcan el estigma, y políticas que garanticen acceso rápido y asequible a servicios de salud mental”, destaca Bein. El informe plantea que la salud mental juvenil está en un punto crítico y que la respuesta debe ser urgente y sostenida.


















