La trama secreta del joven narco “Pequeño J”, buscado por el triple crimen de Florencio Varela

Policiales29/09/2025REDACCIÓNREDACCIÓN
Pequeño J
Pequeño J

El nombre de Tony Janzen Valverde Victoriano apareció de golpe en la escena pública cuando se descubrió su presunto rol en los homicidios de Brenda del Castillo, Morena Verdi y Lara Gutiérrez. Conocido como “Pequeño J”, el joven peruano de 20 años nació en Trujillo y pasó su infancia en un barrio marcado por la pobreza y la violencia. Su identidad permaneció oculta hasta que el caso de Florencio Varela lo puso en el centro de la atención nacional e internacional.

Las primeras informaciones revelaron que “Pequeño J” habría ingresado al país por pasos ilegales en el norte, aunque registros oficiales también lo ubican en un viaje reciente hacia Uruguay por Buquebús. El enigma sobre su estadía en la Argentina suma confusión a una investigación que avanza con múltiples ramificaciones. La Policía bonaerense llegó a su nombre gracias a confesiones parciales de detenidos que lo mencionaron como jefe de la banda.


OTRAS NOTICIAS:

Patricia BullrichGesto de Patricia Bullrich hacia Mauricio Macri reabre especulaciones sobre un acuerdo político


En los operativos realizados en las villas 21-24 y 1-11-14, además de domicilios en La Matanza y Florencio Varela, se obtuvieron pistas de su paradero. “Después de los últimos allanamientos, logramos obtener la información de que ‘Pequeño J’ buscaba fugarse del país y por eso dimos a conocer su rostro, su nombre real y emitimos el alerta de Interpol”, señalaron fuentes de la investigación. Desde entonces, su búsqueda es internacional.

El caso generó conmoción por la brutalidad de los crímenes y por la forma en que fueron exhibidos. Según la hipótesis judicial, el propio “J” habría transmitido las torturas y asesinatos en vivo por Instagram frente a 45 integrantes de su organización. “Esto es lo que pasa cuando alguien me roba”, habría repetido como mensaje de advertencia. El registro del “live” se convirtió en una prueba central en la causa.


OTRAS NOTICIAS:

PullaroPullaro reclamó a Nación por las rutas y apuntó al costo de la logística


Las detenciones posteriores permitieron reconstruir parte de la trama. Miguel Ángel Villanueva, uno de los capturados en la casa de Florencio Varela, habría admitido ser quien filmó la transmisión. Otros apresados, como Magalí Celeste González Guerrero, también aportaron datos sobre el rol del supuesto líder. El viernes pasado se sumó la captura de Lázaro Víctor Sotacuro en Bolivia, acusado de haber aportado un vehículo al operativo.

La estructura de la banda muestra contradicciones que desconciertan a los investigadores. Por un lado, se detecta improvisación en las tareas de ocultamiento. Por otro, hay una violencia extrema que recuerda métodos de cárteles internacionales. Ariel Giménez, otro de los detenidos, fue señalado por testigos como quien habría cavado las fosas en la vivienda donde enterraron a las víctimas. La Policía sospecha que el triple crimen fue planificado con antelación y no producto de un arrebato.


OTRAS NOTICIAS:

Accidente fatal en La PampaUna mujer chubutense murió en un choque en la Ruta 35 de La Pampa y hubo cuatro heridos


El entorno personal de los implicados también sorprende. Matías Agustín Ozorio, apuntado como lugarteniente de “J”, trabajaba hasta hace poco como camarero en un hospital privado. En redes sociales llegó a contestar con naturalidad a quienes lo vinculaban con tareas de sicario. Ese perfil, alejado de la imagen típica de un narco, intriga a los investigadores que siguen el rastro de nuevas generaciones de delincuentes.

El Ministerio de Seguridad, bajo la conducción de Patricia Bullrich, continúa coordinando acciones con fuerzas provinciales y federales. Los fiscales Adrián Arribas y Diego Iglesias concentran las medidas judiciales. El triple crimen de Florencio Varela es considerado “uno de los episodios más brutales de los últimos años”, según fuentes de la Procuraduría de Narcocriminalidad.


OTRAS NOTICIAS:

Sofía HerreraA 17 años de la desaparición de Sofía Herrera la causa sigue abierta y la familia insiste en la búsqueda


La zona de influencia atribuida a “Pequeño J” incluye barrios del sur y oeste del conurbano bonaerense, con sedes operativas en villas porteñas y casas alquiladas usadas como puntos de acopio. Su expansión habría consistido en una modalidad de ventas móviles, que lo diferenció de otras bandas dedicadas al mismo negocio. La investigación busca confirmar si actuaba como jefe autónomo o si respondía a un liderazgo aún más oculto.

La figura de Tony Janzen sigue siendo un misterio para las fuerzas de seguridad, que hasta hace pocos días no tenían registros de su accionar en el país. El triple crimen expuso a un personaje que pasó de ser un desconocido a un prófugo buscado por Interpol en toda la región. Mientras tanto, los familiares de las víctimas reclaman justicia y esperan que la causa avance hasta esclarecer cada detalle.

Fuente: X, Infobae, Clarín, Policía Federal

Te puede interesar

Suscribite al newsletter de #LA17