El Banco Mundial proyecta un crecimiento del 4,6% para Argentina y destaca su disciplina fiscal

El Banco Mundial difundió en Washington un informe con proyecciones para América Latina que coloca a Argentina como la economía con mayor crecimiento esperado para 2025, con una expansión estimada del 4,6%. La cifra supera las previsiones de los economistas locales, que calculan un 3,9%, y refleja una visión más optimista sobre la evolución de la actividad económica en el país.

Según el informe, “en la Argentina continúa un notable rebote económico después de dos años consecutivos de contracción, aunque persisten profundos desafíos”, señaló el organismo multilateral. El análisis atribuye la mejora a la recuperación del sector agrícola y a los primeros signos positivos en el consumo y la inversión privada, factores que acompañan los resultados del plan de estabilización impulsado por el Gobierno.

“Se observan los primeros signos de mejora en el consumo y la inversión, ambos del sector privado, apoyados por la implementación inicial del plan de estabilización gubernamental, que ha coincidido con una menor inflación y un superávit fiscal”, sostuvo el informe. Para el Banco Mundial, la combinación de políticas fiscales prudentes y un repunte productivo genera condiciones favorables para la expansión económica durante el próximo año.

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El documento también destaca la disciplina fiscal de la Argentina, al calificarla como “un caso distinto” dentro del panorama regional. Según el texto, el país “ha logrado avances significativos hacia la consolidación fiscal, consiguiendo superávits fiscales”, un punto que lo diferencia de otras economías latinoamericanas con mayor presión inflacionaria o déficit persistente.

El reporte señala que, en el contexto regional, Guyana ocupa el segundo lugar en crecimiento proyectado con un 11,8%, impulsado por su producción petrolera, mientras que otras economías sudamericanas muestran expectativas más moderadas. En ese escenario, Argentina aparece como una excepción por la magnitud del rebote posrecesión.

Si bien el informe no especifica las fuentes utilizadas, la divergencia con las proyecciones del Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) del Banco Central argentino podría estar vinculada a la fecha de corte de cada análisis y a la actualización de los datos sobre exportaciones agrícolas, que muestran una recuperación más fuerte de lo previsto.

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El Banco Mundial enfatiza que el crecimiento argentino está vinculado a factores estructurales temporales, como la mejora de la cosecha, pero también reconoce señales de estabilidad macroeconómica. Este escenario, según el organismo, podría consolidarse si se mantiene la disciplina fiscal y la inflación continúa desacelerándose.

El informe fue recibido con interés en el ámbito económico local, donde los analistas coinciden en que la perspectiva internacional favorable podría mejorar las condiciones de crédito y la confianza inversora. Sin embargo, advierten que la sostenibilidad del crecimiento dependerá del fortalecimiento del mercado interno y del equilibrio entre las metas fiscales y el poder adquisitivo.

Fuente: NA.