Confirmaron cómo se movían las enigmáticas figuras de la Isla de Pascua
Otros Temas07/10/2025
REDACCIÓN
Isla de Pascua
Durante siglos, el misterio de los moáis mantuvo en vilo a arqueólogos y viajeros. Cómo los antiguos pobladores de Rapa Nui lograron mover esas esculturas de piedra de hasta 80 toneladas fue una incógnita sin resolver... hasta ahora.
Un nuevo estudio científico confirmó que los moáis realmente “caminaban”. Mediante un balanceo controlado, las estatuas se desplazaban erguidas sobre sus bases en forma de D, avanzando paso a paso por los senderos de la isla.
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“La física tiene sentido. Lo que vimos experimentalmente realmente funciona”, explicó el antropólogo Carl Lipo, profesor de la Universidad de Binghamton y uno de los líderes del proyecto. Su equipo combinó modelado 3D, pruebas de campo y análisis físico para comprobar la teoría.
El experimento fue tan audaz como revelador. Los investigadores construyeron una réplica de moái de 4,35 toneladas y lograron moverla 100 metros en solo 40 minutos con la fuerza de 18 personas. Todo, sin rodillos ni trineos. Solo coordinación, balanceo y física pura.
“A medida que se hace más grande, sigue funcionando”, aseguró Lipo, ratificando que la técnica no solo era viable, sino eficiente. Los caminos de Rapa Nui —estrechos, cóncavos y de piedra— habrían sido diseñados especialmente para ese tipo de movimiento.
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“Cada vez que mueven una estatua, parece que están haciendo un camino. El camino es parte del movimiento de la estatua”, añadió el investigador, destacando cómo los habitantes adaptaban las rutas mientras trasladaban cada figura.
El hallazgo derrumba teorías antiguas que proponían el uso de estructuras de madera o transporte horizontal. El modelo del “moai caminante” demuestra que los rapanui aplicaban una lógica ingeniosa, basada en el equilibrio y la observación.
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Además de resolver un enigma, el estudio pone en valor la ingeniería ancestral del pueblo polinesio que habitó la isla desde el año 800. Con recursos mínimos, lograron una proeza monumental que aún asombra a la ciencia moderna.
“Encuentra alguna evidencia que demuestre que no podía caminar. Nada lo refuta”, desafió Lipo. La frase resume la contundencia del descubrimiento y el respeto hacia una cultura que hizo del ingenio su mayor herramienta.
Fuente: Infobae
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